♫ Todo concluye al fin, nada puede escapar... todo tiene un final, todo termina ♫
Y eso incluye el 2015, por supuesto. Un año potente en cuanto a estrenos de cine hollywoodenses apetecibles para el lector de este sitio, repleto de novedades relacionadas con el mundillo de la historieta y la literatura fantástica, y que por supuesto no le fue ajeno al fenómeno televisivo en alza, que cada año nos sorprende con nuevas propuestas que nos terminan dejando, la mayoría de ellas, con la mandíbula por el suelo. Si en algo estuvimos atentos este año en Tierra Freak es en los estrenos que podían llegar a ser del interés del visitante, y es por eso que el 95% de las series enumeradas en esta lista ya tuvieron su respectiva entrada. Pero nunca viene mal un recordatorio, tal y como hicimos el año pasado, sobre todo para los que todavía no le hincaron el diente a muchas de estas producciones.
Better Call Saul
¿Cómo escribís una historia para que sea interesante cuando ya toda la audiencia conoce el final? Ese es el desafío que los realizadores de esta serie tuvieron que plantearse cuando llevaron adelante este proyecto que funciona como un spin-off acronológico de la festejada y multi-galardonada Breaking Bad, pero que a la vez abre el juego para volver a disfrutar de situaciones, diálogos y escenas con el puño y la muñeca de tipos que supieron subir la calidad de un relato televisivo a las nubes, y que disfrutan de generar tensión y hacer fluir la adrenalina por todo nuestro cuerpo mientras hunden a los personajes protagonistas en situaciones cada vez más extremas. BetterCall Saul superó dignamente su prueba de fuego inicial, con un casting ejemplar y algunas vueltas de tuercas inesperadas hacia el final, algo que siempre es de agradecer, y a la vista de lo narrado nada nos indica que en su segunda emisión no vaya a poder conservar esta calidad en su puesta en escena y en el relato. Si Fargo pudo no hay excusas, el desafío no es un imposible.
Wayward Pines
El 2015 también va a ser recordado como el año en el que nuestro querido M. Night Shyamalan regresó a ambos medios (cine y televisión) con relativo éxito pero sobre todo con producciones de una calidad y una frescura enorme, y con la firma inconfundible del Indio para el relato. En la pantalla grande se reivindicó con The Visit, y en la pantalla chica nos sorprendió con un relato muy bien articulado donde volvimos a experimentar ese miedo a lo desconocido que solo series como The Prisoner nos supieron transmitir. WaywardPines comenzó como una aventura finita alrededor de lo que potencialmente podía estar relacionado con las manipulaciones de una secta para terminar transformándose en una gigantesca serie de ciencia ficción, la cual incluye desplazamientos temporales, inteligencia artificial y hasta la existencia de criaturas ancestrales que bien podrían ser “extranjeras”. Las incorporaciones de Matt Dillon, Carla Gugino, Terrence Howard y Juliette Lewis como cabeza del casting deberían ser excusa suficiente para que le des una oportunidad a este show, pero por si faltaba algo, ya está confirmada la 2da temporada. Nuff Said.
Ash vs. Evil Dead
Uno de los productos más esperados del año para cierto sector del fandom, y uno que a mí particularmente me decepcionó en sus comienzos, a diferencia de lo que le sucedió al site manager de Tierra Freak, a raíz de lo que escribió en su entrada. Pero con el correr de los capítulos, la atmósfera de la serie, la dirección Old School aplicada al ambiente y a las escenas dramáticas y de acción, el uso y abuso de guiños y clichés de la saga original y por sobre todas las cosas las tetas de Jill Marie Jones... eh, quiero decir, el carisma de la actuación del maestro indiscutido Bruce Campbell, sumado a la constante colaboración de Lucy Lawless en el entramado de la saga, hace que el recorrido que fue gestando Ash vs. Evil Dead la posicione casi cómodamente en este TOP 10. No es la serie del año, no tengas duda de eso, pero es uno de esos shows muy entretenidos que tenés que ver si querés consumir otro tipo de productos mainstream televisivos.
Dark Matter
En el apartado de ciencia ficción, por suerte este año podemos jactarnos de haber tenido una interminable lista de productos, todos muy parejos y muy entretenidos, no solo en la caja boba sino también en el cine. Sy-Fy Channel salió con todo a la cancha, en aras de recuperar el título de la señal más importante para este género, el cual tenía un poco descuidado, y siendo así estrenó Killjoys, The Expanse, una de las apuestas más grandes en cuanto al presupuesto que requiere para su realización, y la que decido postular en este TOP 10 casi veraniego: Dark Matter. ¿Por qué ésta y no alguna de las otras dos? Porque me pareció la más radical, con la idea potencialmente más interesante para desarrollar, la más cerrada (de The Expanse aparte solo se emitieron 2 capítulos) y sobre todo la más entretenida, la que carga con los personajes más carismáticos. En algún punto esta serie me hace acordar a mi querida Firefly, y eso le suma un montón, como no.
The Man in The High Castle
Comienzo a sentir las risotadas de ciertos lectores asiduos al sitio a medida que van apareciendo las series, pero la realidad es que tuvimos mucha suerte con el resto del staff, porque nos las ingeniamos para darle un espacio a prácticamente las 10 mejores producciones televisivas que se estrenaron durante el año, de una u otra forma, e incluso algunas muy buenas series quedan afuera de esta lista, pero de todos modos también tienen una entrada en Tierra Freak.
Como comenté hace unas semanas, The Man In The High Castle es una magistral maxi-serie de solo 10 capítulos que adapta la obra homónima de Philip K. Dick de manera íntegra, y que no tiene desperdicio en ninguno de sus puntos: ni como adaptación televisiva, ni en el casting elegido ni en la complicada puesta en escena que requirió para revivir esas ciudades norteamericanas de los ’60 inmersas en un gobierno alemán o japonés totalitario. Un lujito que podemos darnos gracias a los preciosos tiempos que vivimos.
Jessica Jones
¿La sorpresa de la temporada, quizás? Sorpresa porque eran pocos, muy pocos, los que apostaron por este producto. Más allá del respaldo que Netflix y Marvel Studios le otorgan, prácticamente nadie conocía al personaje de la historieta, y a no muchos les interesa una serie de acción protagonizada por una mujer... y sino, agarren una lista de series exitosas de acción para la caja boba, y marquen aquellas que, como por ejemplo Nikita o Alias, posan su protagonismo en una seductora espalda femenina. El patriarcado se hace presente en las propuestas televisivas de este tipo.
Siendo así, que algo como Jessica Jones salga tan bien parado es para aplaudir de pie. La inevitable comparación con su serie hermana también podría haberle quitado resto físico, pero lo mantuvo hasta el desenlace de la misma, y así Jessica logró meterse en nuestros corazones para siempre, como ya lo había hecho hace eones a través del papel... y ahora solo nos queda extrañarla hasta su regreso en The Defenders o volver a ver estos 13 preciosos capítulos una y otra vez...
Wet Hot American Summer: First Day of Camp
¡Finalmente, una serie en el TOP 10 que no tiene entrada previa en Tierra Freak! Wet Hot American Summer: First Day of Camp es realmente una bizarreada, una de las descabelladas propuestas de Netflix, una de esas apuestas que no terminamos de entender desde el lado de los negocios porque nos faltan conocimientos en la materia, pero una movida que de todos modos festejamos porque termina resultando en un producto ligero pero muy entretenido y repleto de gags Old School (un término del cual estoy abusando el día de hoy). La mini-serie en cuestión es la precuela de un film homónimo que fue estrenado hace 14 años, en el 2001, y que pasó sin pena ni gloria pero se convirtió en una película de culto. El casting original vuelve a representar los mismos personajes... ¡Sólo que más jóvenes aún de lo que eran en aquel lejano 2001! Así que no solo el tenor de la comedia y el matiz paródico de aquellos años se mantienen intactos, sino que como bonus los tenemos a Elizabeth Banks, Bradley Cooper, Janeane Garofalo, Paul Rudd, Jason Schwartzman, Molly Shannon y una decena más maquillados como si tuvieran 20 años menos.
Teniendo en cuenta la pobre oferta de estrenos de Sitcoms que tuvo el 2015 –no por la ausencia de estrenos sino por la presencia de buenas producciones-, Wet Hot American Summer: First Day of Camp es una opción viable y distintiva. Denle una oportunidad.
12 Monkeys
Ya hemos establecido a lo largo del año que una remake en televisión de una película de culto no necesariamente podía resultar en un estrepitoso fracaso. 12 Monkeys es una de esas honrosas excepciones donde un gigantesco rompecabezas con algunas piezas ligeramente conocidas para el televidente se disponen de manera desordenada pero con cierta familiaridad a lo largo y ancho de una temporada televisiva, y una ingeniosa muñeca re-escribe la conjunción del mismo de forma tal que nos mantenga en vilo capítulo a capítulo. Algunos personajes se han conservado del film homónimo, otros han tenido leves alteraciones, pero la escencia de 12 Monkeys se mantuvo intacta, y ya tiene confirmada una segunda temporada. Es, además, otra de esas preciosas series cortas, de solo 13 episodios, que con garra y viento a favor te clavás en un fin de semana. ¡A por ella!
Daredevil
Hay un antes y un después de Daredevil, la serie de Netflix producida por Marvel Studios que reintroduce a nuestro abogado favorito al universo fílmico de Marvel. Nunca jamás se hizo una serie relacionada con un personaje superheróico con un nivel tan alto de producción, y apostando a tanto. Nunca con un guión tan pulido donde cada episodio parece un capítulo de un guión cinematográfico. Nunca con una puesta en escena tan gratificante que incluya muchos FX’s en los momentos justos y unas coreos que te vuelan la peluca. Nunca con un casting tan correcto que termine convenciendo de una u otra forma incluso al fan más acérrimo. Nunca con un sentido común tan afilado para adaptar lo más apropiado para contar del personaje en una primera entrega. Nunca una serie de este tipo estuvo tan bien balanceada. Nunca. Y quizás nunca más vuelva a ocurrir, así que... si aún no la viste, querido lector... no sé que más puede motivarte a hacerlo, la verdad.
Mr. Robot
El mejor estreno del año, tan sencillo como eso. Mr. Robot es un producto distinto, algo que no se ve todos los días, es una pieza de la arquitectura multi-media moderna delicada y refinada, algo que solo puede ser producido por años y años de consumo cinematográfico y televisivo, es una obra que aúna lo mejor de todo y lo resume de manera original y creativa. Ese fantasma de fin de siglo que como sociedad venimos arrastrando desde hace década y media, ese que pregona el fin de la civilización tal y cómo la conocemos y que, para su ejecución, busca las mil y un maneras, ese que nos acompaña con cada cambio de gobierno, con cada alerta meteorológica, con cada movimiento brusco en el vaticano, con cada atentado terrorista, ese... es el protagonista implícito de Mr. Robot.
Postulada por muchos como la primer serie de hackers verosímil (?) -como si el público masivo tuviera las facultades necesarias para poder diferencias un hackeo verosímil de uno que no lo es tanto-, Mr. Robot se posicionó como uno de los dramas mejor escritos y caracterizados, que además contó con una producción óptima y muy obsesionada con ciertos detalles estéticos que potenciaron el show y lo dotaron de una personalidad única e inconfundible, catapultando esta producción a la cima, en un mano a mano con la segunda temporada de Fargo, el show que a mi entender fue lo mejor que dio este año la televisión.
Espero haberles servido de guía para lo que, quizás, se convierte en un buen catálogo de pre-selección para las vacaciones que se nos vienen encima a muchos, y sobre todo espero volver a leerlos en la última entrada del año, el próximo jueves, aquí, en Tierra Freak.