Antes de Facebook, antes de Twitter, antes de Instagram, antes de Youtube, antes de Internet masivo, antes de la proliferación de los Sex Tapes, antes de Paranormal Activity y [Rec], antes de Matrix y de The Lord of the Rings: The Fellowship of the Ring, antes de un montón de fenómenos culturales trascendentes que nacieron de las pantallas del cine, pero no tan antes como para que suene prehistórico, estuvo The Blair Witch Project. Un grupo de aficionados al cine construyó un mito, una leyenda, alrededor de un falso documental que narraba las peripecias de 3 cineastas yanquies investigando fenómenos paranormales, y en base a una delicada y depurada campaña de promoción terminaron creando un monstruo que los devoró incluso a ellos, y se transformó en la película más taquillera de la historia del cine si tomamos en cuenta la relación que hay entre la inversión y la taquilla: por cada mil dólares invertidos se llevaron 10 millones de la misma moneda de ganancia. Esta es mi reseña dedicada a una película y un proyecto que merecen ser recordados como una muestra de que la inteligencia y el buen gusto por un cine poco convencional pueden dar excelentes resultados… pero hay que saber qué hacer con tanto éxito.