Hoy, por ser el jueves previo a los Oscars, voy a hacer algo que no acostumbro dentro de Tierra Freak, pero que nada tiene que ver con la entrega de la academia, ni con el cine –al menos no de forma directa-, pero que es, también, atípico en mí, y por lo tanto, “especial”: voy a reseñar una serie que comenzó hace unos dos años, y que tiene confirmada ya una cuarta temporada, así que está lejos aún de terminar. ¿Y qué carajo tiene de “especial” eso?, se preguntarán algunos… Bueno, yo acostumbro encaminar dos tipos de reseñas cuando se trata de series televisivas: o bien agarro el piloto de la misma –o los primeros dos o tres capítulos- y me aventuro sobre lo que podemos esperar de la serie con muy poco visto e intento vaticinar si las expectativas puestas en ella tendrán buen puerto, o bien le dedico una entrada a una serie que ya ha culminado, ya sea porque lo hizo recientemente o porque se cumplió algún aniversario de la misma que me habilita para poder explayarme sobre ella a gusto y piacere. He tenido un par de excepciones a estas reglas implícitas, como cuando reseñé las Season Finales de Person of Interest, Arrow y Agents of S.H.I.E.L.D. del año pasado o cuando me explayé sobre el crossover superheróico televisivodel año hace apenas dos meses, pero fueron casos muy puntuales y excepcionales que encima incluían muchas series a las que, como mínimo, había reseñado sus pilotos.