No es que disfrute de redundar en los títulos de mis reseñas, querido lector, ni tampoco estoy intentando establecer una relación entre esta entrada y la que levanté unas semanas atrás sobre la maldita cronología, para nada. Maldita Policía fue, para quien vive al margen de las noticias locales o tiene una débil memoria, el término que acuñó el periodismo para la policía Bonaerense a cargo del difunto Pedro Klodczyk, a quien el gobernador de la provincia de Buenos Aires en ese entonces, Eduardo Duhalde, calificó como el mejor jefe de la mejor policía del mundo, una fuerza de seguridad que tiempo después estuvo vinculada al tráfico de drogas, a piratas del asfalto, a grandes bandas de asaltantes de bancos y blindados, y que fue acusada de coimas por la prostitución y el juego clandestino, “arreglos” con delincuentes y hasta se la relacionó con el atentado contra la AMIA. Teniendo en cuenta que el tema volvió a ser noticia el año pasado en nuestro país, y al día de hoy todas las semanas estamos recibiendo alguna novedad relacionada con el narcotráfico y la relación que tiene con las fuerzas de seguridad, en la reseña de hoy voy a acercarles la primera parte de un ranking de las diez mejores producciones norteamericanas de cine donde el foco del guión esté puesto en el turbio accionar de policías que dejan de lado sus deberes y obligaciones para con la sociedad y trabajan codo a codo con la delincuencia. Voy a dividir el ranking en dos partes para no hacer cada reseña tan densa, y porque considero que es un tema entretenido e importante que se banca dos entradas. La idea no es rankear films donde uno o varios canas corruptos forman parte de la trama de forma tangencial, sino aquellas producciones que tienen como eje el desenmascaramiento de un equipo de yutas trabajando de forma conjunta para tal fin, films en los que generalmente hay un cana decente que no ha perdido de vista el poder y las responsabilidades que conlleva pertenecer a estas fuerzas de seguridad, y pone en juego su carrera y su vida combatiendo dicha corrupción desde adentro. Tampoco es mi intención reseñar películas que tengan como protagonista a personajes del estilo el que caracterizó Matthew McConaughey en Killer Joe (2011), o el de Harvey Keitel en Bad Lieutenant (1992) [que tuvo su remake con el groso de Nic Cage en Bad Lieutenant: Port of Call New Orleans (2009)] o sea, un policía mentalmente desequilibrado, no… cuando vayan leyendo la lista y cada entrada, se darán cuenta por donde vienen los tiros. Pasemos entonces a la misma.