viernes, 12 de diciembre de 2014

Sons of Anarchy: Una curva jodida - La Columna de Logan.



El 2014 ya se acaba, y termina siendo un año duro. Emotivo, pero duro. Muchas grandes series de televisión dieron sus últimos pasos, y  por suerte mi co-equiper y yo tenemos la buena fortuna de ocupar este espacio para reflexionar sobre las mimas. Yo lo hice con Californication, y mi compañero, el Dr. Morholt, hizo lo mismo con How I Met Your Mother, y escribió una entrada al comienzo de la última temporada de True Blood, otro gran drama fantástico de HBO que también concluyó este año. Hoy le toca el turno a una de mis series favoritas, que se ganó un espacio en mi corazón los últimos años a fuerza de un reguero de cadáveres exquisitos que fueron quedando en el camino, algunos dentro y otros fuera de una hermandad inquebrantable que se antepone ante cualquier otra cosa y que, aún con sus defectos, puede hacer gala de poseer unos férreos códigos forjados por la historia y el legado que portan sus tatuados miembros, al ritmo del mejor rock de la vieja escuela, recorriendo la ruta portando sus chalecos distintivos y montados sobre sus motos choppers. Estoy hablando de Sons of Anarchy, la genial creación de Kurt Sutter para la cadena FX que esta semana llegó al final del recorrido con su capítulo #92, dejando a los fans que acompañaron la misma más que complacidos con lo vivido en estos vertiginosos siete años. Hoy en Tierra Freak le damos el espacio que merece.



MEN OF MAYHEM - REDWOOD ORIGINAL

Lo que la gente –y aquí me incluyo- sabe sobre los clubes de motoqueros (MC en el original en inglés, de Motorcycle Club) es poco, y seguramente se limita al nombre de los famosos Hells Angels y de su fatídica participación como seguridad del recital de los Rolling Stones en el Altamont Free Concert en 1969, en el cual el Hells Angel Alan Passaro mató a puñaladas a Meredith Hunter, un afro-americano que formaba parte del público y que empuñaba un arma de fuego para, presumiblemente, disparar contra la banda, y quizás dentro de la memora-biblia popular de esta tribu podríamos mencionar la película Easy Rider (1969), escrita y dirigida por Dennis Hopper y protagonizada por él y Peter Fonda, con la participación de Phil Spector. Y, claro, quienes miramos todo este mundo desde afuera también tenemos presente parte de la estética y de algunos rituales que caracterizan a estos muchachos: sus largas y mullidas barbas, sus tatuajes, sus ropas de cuero, sus camperas o chalecos con el emblema del club al que pertenecen, y sus motos. Puede que aquellos que hayan ahondado un poco más en esta sub-cultura se hayan encontrado con algunos mitos y hayan chocado con algunos casos policiales un poco más jodidos que el que describí al principio de este párrafo, y hayan caído en la cuenta de que muchos de estos MC solventan su forma de vida a través de actividades ilegales, y conviven en constantes choques con la ley. Uno de los objetivos de Kurt Sutter cuando comenzó a cranear un show como Sons of Anarchy (SOA desde ahora) fue contar con lujo de detalle todo lo que concierne a estas bandas de forajidos fueras de ley que son lo más parecido a una mafia propia que tiene el pueblo norteamericano, ya que, al igual que esta organización de origen Siciliano, cuentan con sus propias reglas y códigos y tienen severos castigos para los miembros que desatienden las mismas, tienen una tendencia a menospreciar las normas legales sobre las que tiene que vivir cualquier miembro de la sociedad porque para ellos la única ley es la que impone su propia organización y la única autoridad es la que existe dentro de sus círculos de relación, y existe entre ellos una fuerte amistad que trasciende cualquier otro tipo de relación -afectiva o comercial-, y que los lleva incluso a arriesgar sus vidas si con eso logran salvar la de un “hermano”.

Para lograr ese objetivo, Sutter puso especial atención a los detalles, lo que es de agradecer, y cubrió prácticamente todos los espectros posibles de relaciones y situaciones, además de dotar al show de elementos propios característicos que no necesariamente forman parte de la situación que muchos de estos MC viven en la vida real, y acompañar estas aventuras con una banda de sonido inmensa, poderosa y plagada del mejor rock Old School, surfeando entre temas clásicos –a veces en sus versiones originales, otras en deliciosos covers- y canciones que a la maza le resultan desconocidas pero que guardan siempre una relación con el show, con el clima que tiene y sobre todo con el momento que el televidente está viviendo como espectador del mismo. El resultado final se acerca mucho a la conocida tragedia escrita por el dramaturgo inglés William Shakespeare de nombre Hamlet, la cual se desarrolla en Dinamarca, y en la que se narran los acontecimientos posteriores al asesinato del Rey Hamlet (padre del príncipe Hamlet) a manos de Claudio (hermano del rey), y donde el fantasma del rey le pide a su hijo que vengue su asesino. Una obra que aborda la locura (la real y la fingida), y que habla de la transformación del profundo dolor en desmesurada ira, además de explorar temas como la traición, la venganza, el incesto y la corrupción moral.

THE LIFE AND DEATH OF SAM CROW.
HOW THE SONS OF ANARCHY LOST THEIR WAY.
BY JOHN THOMAS TELLER.

La historia de SOA está protagonizada por Jackson "Jax" Teller, caracterizado magistralmente por Charlie Hunnam, quien en la ficción es hijo de John Thomas Teller, uno de los nueve miembros fundadores del charter que originalmente se llamó los Redwood Originals, y que también incluyó a Piermont "Piney" Winston (interpretado por William Lucking) y a Clarence "Clay" Morrow (personaje al que dio vida el inmenso, enorme Ron Perlman, en una de sus mejores actuaciones de todos los tiempos). Cuando comienza la serie, de a poco, vamos conociendo no solo a los miembros de este charter (un charter es una sección del club, en este caso la que da vida a la serie está ubicada en la localidad ficticia de Charming, situada en el estado de California) sino también la historia que los une: el padre de Jax falleció hace casi 20 años en un extraño accidente con su moto, y en el presente, de los nueve miembros originales solo quedan dos vivos, Piney y Clay, este último es el actual presidente de este charter, y Jax es el vice-presidente… y también su hijastro, dado que Clay está en pareja con la madre de Jax, Gemma Teller Morrow, uno de los personajes más importantes de la serie y casi la columna vertebral de la misma sobre la cual se disparan la mayoría de los conflictos que dan vida a la misma, con una inolvidable e impecable caracterización de Katey Sagal, que en la vida real es la esposa de Kurt Sutter, el creador del show.


La sede en Charming se encuentra junto al taller de mecánica Teller-Morrow, y desde ahí el club protege y controla en ciertos aspectos el pueblo mediante influencias en la comunidad, sobornos, violencia, extorsión y tráfico de armas. El nombre completo del club con los años terminó mutando en Sons of Anarchy Motorcycle Club, Redwood Original, y es por eso que frecuentemente se refieren al mismo como SAMCRO (acrónimo de Sons of Anarchy Motorcycle Club, Redwood Original) o Sam Crow. El logo o emblema del club muestra a la muerte blandiendo un Fusil M16 con una guadaña ensangrentada como bayoneta y sujetando una bola de cristal con la "A" de anarquía, y cada miembro del mismo lleva un chaleco o chaqueta con este ícono cosido en la misma, y esto forma parte del “uniforme” oficial del club, pero va mucho más allá de eso: esa chaqueta es una recompensa, un reconocimiento del club hacia sus miembros, y para cada integrante del mismo es un honor portar dicha chaqueta, y tiene que estar a la altura de ese reconocimiento. En consecuencia, esta chaqueta vale su peso en oro, y no solo la portas en todo momento, la proteges con tu vida. Si intentamos plantear un paralelo con algo que a nosotros –los argentinos- nos es familiar, una chaqueta de estas características es como la bandera oficial de un club de fútbol, para los hinchas es un estandarte, y para los clubs opuestos es un objeto que, en medio de una confrontación, deberían poseer para mostrar la máxima humillación hacia sus oponentes. Perder la chaqueta en una contienda es un claro signo de debilidad, pero sobre todo es faltarle el respeto a la historia que guarda el club, y claramente es una muestra de la falta de compromiso que estás teniendo, en ese momento, con tus hermanos. Cada chaqueta, adelante, lleva cosida tres inscripciones: “Redwood Original” del lado derecho (si la ves de frente), que hace referencia al nombre original que John Teller y Piney le pusieron al club al fundarlo, y "Men of Mayhem" y "Reaper Crew", dos frases que anuncian que ese miembro del club derramó sangre por sus hermanos. Eventualmente, la frase "Reaper Crew" es reemplazada por una etiqueta con el mismo diseño y tamaño que dice “President” o “V. President”, si fuera el caso de las chaquetas de los miembros que tienen estos cargos dentro del Club.

Parece un poco obvia esta aclaración, pero tengo que hacerla: no podes ser un miembro activo del club si no podes montar una moto. El vehículo por antonomasia del club es una Harley-Davidson Dynascustom, con excepción de Piney, el miembro más viejo del charter de Charming, que conduce una Harley Davidson Trike. Vale la aclaración, de todos modos, porque cuando comienza la primer temporada somos testigos de los problemas que está teniendo Clay para llevar adelante esta aparentemente sencilla encomienda –si es que has vivido toda tu puta vida sobre dos ruedas, se entiende-, dado que sufre de una osteoartritis (una enfermedad producida por el desgaste del cartílago-tejido que hace de amortiguador al proteger los extremos de los huesos y que favorece el movimiento de la articulación) en sus manos que pone en riesgo esta encomienda, enfermedad que, por el momento, mantiene a raya con unas inyecciones.

El show, entonces, nos muestra el accionar de SAMCRO en Charming, que tiene como pantalla el taller de reparación de motos (se hace evidente que es un taller rentable, y muchos de los miembros de SAMCRO trabajan solo ahí, pero el grueso de los ingresos del club viene de otros lados) pero que subsiste gracias a la importación y venta ilegal de armas, las cuales consiguen gracias a una fuerte relación que mantienen y han cultivado con los años con el True Irish Republican Army (TIRA, el Ejército Republicano Irlandés Auténtico), y que tiene ramificaciones mucho más profundas de las que podemos percibir en los inicios de la serie. SAMCRO se encarga, además, de que Charming sea una zona libre de drogas, y para esto le tienen que plantar pelea a una agrupación que se identifica como la supremacía blanca, unos nazis de cuarta bastante jodidos que pretenden ampliar sus horizontes. Otros de los problemas con los que SAMCRO tiene que lidiar es una expansión de otro CM, los “Mayans”, una banda de mexicanos asentada en Oakland que está liderada por Marcus Álvarez, y quienes controlan el territorio del norte de California, los cuales están enfrentados con los One-Niners, una banda callejera de afroamericanos a los que SAMCRO provee de armas. Sumado a esto está la mafia chinoamericana de San Francisco, denominada la “Triada de Lin”, liderada por Henry Lin, y la familia italoamericana Cacuzza, una mafia tana manejada por Jimmy Cacuzza.

RED ROSE

Pero como SOA es, antes que nada, un drama, los conflictos del show no se limitan exclusivamente a los enfrentamientos entre bandas, aunque por supuesto muchas veces las consecuencias de dichos choques son mortales y tienen enormes repercusiones en los dramas personales de cada integrante de SAMCRO. La habilidad de Sutter como showrunner, por supuesto, radica en encontrar siempre un justo balance entre la acción y el drama, y el mérito de su cruzada ahora que podemos evaluarla completa es en haberlo logrado en la totalidad del camino recorrido, aún cuando por momentos creíamos que nada podía superar lo visto. 

Si Jax es el protagonista de SOA, ¿Por qué expuse más arriba que Gemma, su madre, es la columna vertebral de la serie? Bueno, por las mentiras que ella sostuvo durante toda su existencia, que tuvieron repercusiones en su familia, en sus amigos, en los seres cercanos a ella en afectos, y también en sus enemigos. En todos. Gemma con su fuerte personalidad y su instinto de madre sobre-protectora se transformó en una granada fragmentaria que esparció esquirlas a lo largo y ancho de la serie, en el presente y hacia el pasado, hiriendo muchas veces de muerte –conscientemente o inconscientemente, como consecuencia de sus mentiras- a personas que intentó proteger y que amaba profundamente. Cuando sos espectador, cuesta mucho ponerse en la piel de Gemma, y no me cabe duda que muchos la deben considerar un villano más del show, casi tan letal como el más peligroso mafioso italiano armado hasta la médula en busca de venganza, pero si logras hacerlo incluso hasta podrías justificar mucho de sus actos.

Pero amén de Gemma, el show cuenta con un abanico de personajes enormes, muy bien plasmados y desarrollados, caracterizados con mucha altura y solidez, nunca sobre actuados, siempre ajustados en sus diálogos y con apariciones y participaciones en la justa medida, que dotaron de color y variedad la saga, y que de distinta manera se fueron transformando en nuestra hermandad, la del televidente. SAMCRO, al menos cuando el show comienza, cuenta entre sus filas, además de Jax, Clay y Piney, con Alex "Tig" Trager, personificado por Kim Coates, un forajido de mirada penetrante y enfermiza que representa la parte más border del charter, un psicópata totalmente entregado al club y a sus hermanos que parece disfrutar de los trabajos más jodidos que el club tiene que llevar adelante, y junto a él, Filip "Chibs" Telford, caracterizado por Tommy Flanagan, oriundo de Glasgow, Escocia, pero criado en Belfast, Irlanda del Norte, la voz de la cordura y el contacto más cercano que SAMCRO tiene con los “Reyes” del IRA, además de ser el hombro sobre el cual Clay y sobre todo Jax se apoyan cuando las cosas se ponen realmente complicadas. Luego están Robert "Bobby Elvis" Munson, en la piel de Mark Boone Jr, contador de SAMCRO y uno de los miembros más viejos –pero más joven que Clay y Piney-, Juan Carlos "Juice" Ortiz, al que le dio vida Theo Rossi, el “hacker” de SAMCRO, y Kip "Half-Sack" Epps, interpretado por Johnny Lewis, un newbie que perdió uno de sus testículos siendo un milico durante la última guerra contra Irak. Cuando el show comienza, el mejor amigo de Jax, Harry "Opie" Winston, que fue llevado adelante por el actor Ryan Hurst, se encuentra alejado de SAMCRO, debido a que se comió 5 años en cana por el club, y esto puso en jaque la relación con su mujer, Donna, pero su habilidad para el manejo de los explosivos y, eventualmente cuando el show avance, sus problemas económicos –pero sobre todo el amor que le tiene a Jax y a SAMCRO- terminarán por depositarlo de nuevo dentro de las filas del club. Además, por supuesto, Opie es hijo de Piney, y el legado familiar es, en este caso, una carga demasiado pesada como para dejarla a un lado.

The Final Ride


Lo que me sucede a mí con este tipo de reseñas es que cuando una serie es magnífica como SOA, y ha entregado tanto material para recordar, homenajear o referenciar, y está tan plagada de detalles exquisitos que dotaron al show de elementos únicos y paradigmáticos para cualquier proyecto posterior que pretenda recuperar esta sub-cultura, se me figura difícil –por no decir imposible- encausar un texto único que sirva tanto para aquellos que, como yo, vivieron este delicioso infierno semana a semana como para los que nunca han podido acercarse al producto de Sutter (quien, por cierto, también se dio el gusto de caracterizar un personaje dentro de SOA: "Big" Otto Delaney, quien desde la cárcel le dio una mano a los “hijos” cada vez que pudo, muchas veces sacrificando incluso parte de su “carne”), y llega un punto en el cual me planteo si esto es una buena idea, o si definitivamente debería decantarme por satisfacer solo a los fans y vomitar todo tipo de spoiler posible y ya. E incluso desde esa perspectiva, existe el riesgo de pasar algo realmente importante para la saga por alto, o darle poco espacio a un evento que quizás merecía mucho más… ahora mismo estoy escribiendo esto y pienso, ¿porqué aún no mencioné la mesa?

La mesa es, como su nombre lo indica, una enorme tabla rectangular de madera que tiene tallada en su superficie el logo del charter, la parca blandiendo un Fusil M16 con una guadaña ensangrentada como bayoneta, y que cuenta además con un martillo, mismo que utiliza el Presidente del Club, quien se sienta por supuesto en uno de sus extremos, para dar finalizada cada reunión. Las reuniones alrededor de la mesa son exclusivas para miembros del club, ni siquiera pueden formar parte de la misma los novatos que aún están “calificando” para entrar a SAMCRO de forma oficial. De hecho, en dicha mesa se vota por la incorporación o no de un nuevo miembro, y dicho voto tiene que ser validado con la unanimidad de los presentes. En la mesa se habla también de todos los temas que conciernen al club, se plantean estrategias, se proyectan caminos, y se vierten sospechas, se revelan mentiras, se toman todas las decisiones. Nada que haga SAMCRO –o cualquier otro charter, cada uno tiene su propia mesa- como entidad se hace sin antes haberlo decidido alrededor de la mesa, con el conocimiento y el aval de todos los miembros. 

Y si hablamos de “detalles”, bueno… el simbolismo que revelan muchos de los mismos va más allá de las interpretaciones de cada uno, y llegado cierto punto de la trama nada queda librado al azar y todo termina teniendo un porqué, aún cuando la justificación aparezca recién al final. Jax, por ejemplo, tiene un par de anillos con las letras SONS grabadas en los mismos (SO en uno, NS en el otro), y estos objetos serán dejados sobre la lápida de la tumba de un ser querido para él, cuando comience a recorrer otro tipo de camino, un camino que su difunto compañero había transitado, y que cuando se alejó del mismo lo pagó con su existencia. La fuerza y sutileza de esta escena te deja sin aliento… máxime cuando caemos en la cuenta de que un anillo es el que la abuela Gemma le regaló a uno de sus nietos, dejándole en claro que era el que su abuelo utilizaba (John Teller, el padre de Jax), y que representa la afinidad y pertenencia a la hermandad. Este tipo de conexiones presentes pero que cargan con un legado temporal se dan todo el tiempo en el show, como por ejemplo que el hermano de Jax haya fallecido por un trastorno cardíaco congénito a los 6 años, y que el 1er hijo de Jax, Abel, naciera con el mismo problema (no por nada Jax lleva el nombre de este hijo tatuado en el pecho, donde está su corazón), o que un miembro de SAMCRO, en el piloto de la serie, haciendo un chiste, le dijera a uno de sus compañeros que le metería dos tiros en la nuca... y 6 temporadas después ese personaje muera por un tiro en la nuca, disparado efectivamente por el receptor del comentario-chiste en ese episodio piloto

La serie contó con una impronta y una personalidad que se pueden verificar desde el comienzo de la misma. Una de las características del show son los videoclips que aparecen en casi todos los capítulos, promediando el final de los mismos, musicalizados por un tema tremendo que te llega al corazón por la fuerza de sus notas o por la emotividad de la letra en relación con la trama del episodio, y que muestra en las escenas las consecuencias de lo visto en los 45 minutos previos, que en el piloto es nada más y nada menos que “Can't Help Falling In Love”, de Elvis Presley, en una performance de Bobby imitando al Rey del Rock.
  
El final del recorrido nos encuentra con todo lo que prometió Sutter, y más. Atrás quedaron las participaciones especiales de estrellas como Dave Navarro, Danny Trejo, Stephen King, Marilyn Manson, Courtney Love, David Hasselhoff, Jenna Jameson y la joven actriz de Glee, Lea Michele. Atrás quedó también la incorporación al elenco –de forma fija o con recurrentes apariciones- de Drea de Matteo dando vida a la ex-esposa de Jax, Wendy Teller, a Winter Ave Zoli caracterizando a la dulce, sexy y delicada actriz porno devenida en directora Lyla, que se puso la mochila al hombro y llevó adelante el primer film de “Red Woody Productions”, a Maggie Siff personificando a Tara Knowles-Teller, la pareja que más tiempo vimos en pantalla de Jax, a Jimmy Smits y su soberbia y dramática caracterización de Nero Padilla, el socio de Jax en La Diosa que entró casi por una ventana a ocupar un espacio vacío y terminó siendo parte fundamental del sostén económico y moral de SAMCRO, a Dayton Callie con su comisario Wayne Unser, el eterno confidente de Gemma, y muy a su pesar, un aliado incondicional de SAMCRO,  y finalmente a Michael Ornstein y su querible Chuck Marstein, ese extraño “intruso” que deambuló por SAMCRO como un testigo silencioso de todo lo que allí sucedía, y que tenía que cargar con ese desorden obsesivo-compulsivo por la masturbación que le valió sus dedos. Atrás quedó también el encarcelamiento de casi todos los miembros de SAMCRO durante 14 meses en la prisión de Stocktown, la guerra contra el F.B.I. y la D.E.A., el precioso viaje a Belfast para recuperar a Abel (probablemente una de las “sagas” dentro de la gran saga que es SOA que yo más disfruté, es el re-encuentro de muchos de los miembros de SAMCRO con sus raíces), las guerras contra la mafia rusa, la mafia italiana, los Lobos Sonora, el Galindo Cartel, la League of American Nationalists y los Nordics, y por supuesto las disputas y/o alianzas (dependiendo del momento) con los Mayans y la tríada de Lin. Ese camino que comenzó con Jax leyendo los diarios ocultos de su padre, John Thomas Teller, y que se inicia con una primer toma dando un plano general de dos cuervos en medio de la ruta desmenuzando algo comestible segundos antes de tener que hacerse a un lado para dar paso a una moto conducida por Jax, como todo buen círculo narrativo se termina cerrando con una última escena análoga, con prácticamente los mismos protagonistas en una situación muy parecida. Y como si eso no fuera suficiente, el capítulo final se guarda una enorme, gigantesca y, al menos para mí, inesperada vuelta de tuerca en relación a las estrictas "reglas" en la asunción de los miembros, mismas que en otro momento del show pusieron en jaque la supervivencia de uno de sus miembros y lo motivaron a transformarse en una “rata”, un traidor.


Sutter y su equipo prometieron una séptima y última temporada mucho más oscura que cualquiera de las anteriores, repleta de cadáveres y morbo e inmersa en el más oscuro drama, con los suficientes golpes bajos como para que ningún estómago pudiera resistirlos, pero dispuestos y vertidos a lo largo de la trama de forma coherente, poniendo a SAMCRO en jaque como nunca antes había estado… y cumplieron con creces: cada capítulo de este último viaje no baja de los 9 puntos, no hay un solo episodio que no te pegue una patada en los testículos y te haga tragar sangre, no sobra un solo minuto de narración y el aire rancio, vicioso, denso e intoxicado que te imposibilita respirar con naturalidad se siente en cada episodio de estas últimas 13 emisiones. Los únicos que podrían elevar una queja sobre esta montaña rusa de emociones violentas son los eunucos castrados que pretendían que los últimos días de Jax y sus compañeros olieran a rosas. SOA te mostró con detalle los pormenores de una sub-cultura que tiene una única forma concebir la existencia en este mundo, y que solo sabe relacionarse a través de la violencia, con las consecuencias que conlleva moverse por la vida de esa manera… si renegás de eso después de siete temporadas, el problema lo tenés vos. Espero haber estado a la altura de las circunstancias, y también espero leerlos la semana que viene, acá, en Tierra Freak.

Doubt thou the stars are fire;
Doubt that the sun doth move;
Doubt truth to be a liar;
But never doubt I love.
            - William Shakespeare
[Hamlet, acto 2, escena 6]

Traducción:
Duda que son de fuego las estrellas;
Duda si al sol hoy movimiento falta;
Duda lo cierto, admite lo dudoso;
Pero no dudes de mi amor las ansias.
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