Hola, mis queridos lectores. Después de unas semanas de descanso debido a unas merecidas vacaciones (?), regreso a esta columna para inaugurar el 2013 con todo, recurriendo al archivo del corazón y homenajeando una de esas series a las que le guardo mucho afecto por múltiples motivos. En septiembre del año pasado se cumplieron 10 años del estreno de uno de los shows televisivos más cortos y sin embargo más recordados del genial director de The Avengers (2012), Joss Whedon. Estoy hablando, claro está, de Firefly (2002), la épica aventura espacial en tono Western que reunió un grupo de outsiders a bordo de la preciosa nave Serenity, quienes de la mano del Capitán Malcolm "Mal" Reynolds vivieron múltiples y peligrosas aventuras, siempre el filo de la Ley evadiendo constantemente los ataques de la Alianza.
Historias de Guerra
Permítanme que les cuente una anécdota. Casi seguro que muchos ya la conocen dado que hoy la web nos ha posicionado en un lugar donde la información no vale lo mismo que dos décadas atrás, pero a nadie le va a saber mal recordarla. En esta historia hay Héroes y villanos… bah, un solo villano, su nombre empieza con F, f de FOX, ¿no? Claro, y el villano incluso logra su cometido en cierto momento, y derrota a los Héroes por knockout... pero aparecen otros héroes, así, con minúscula, de donde uno menos lo esperaba, y salvan el día.
Resulta que la Ciencia Ficción tiene ese efecto en los fans, en los nerds, los geeks, despierta un tipo de pasión que pocas veces se ve en otros géneros. Se me ocurre que años atrás sucedía también algo parecido con la fantasía, sobre todo con la de capas, espadas y brujería, pero en la T.V. más que nada este fenómeno se ve de forma más pronunciada en el Sci-Fi.
Firefly es una idea de Joss Whedon, fue su hijo pródigo durante los comienzos del nuevo siglo y sigue siendo uno de sus niños favoritos aún hoy, la prueba de eso es lo conmovido que se lo vio al colorado en la Comic Con de San Diego del año pasado, donde se presentó junto a parte del cast de esta serie –Firefly- para rememorar y festejar los 10 años del estreno, y sobre todo para agradecer a los Fans. Los Fans de Firefly no son algo menor, sépanlo. No son jodidos, pero son apasionados y muy organizados, y como pocas veces en la historia de la T.V., lograron cambiar el destino de esta serie.
Es así como en septiembre del 2002 en FOX se estrenó en un especial de 2 horas (que en realidad reunió a los dos primeros episodios de la serie, auto-conclusivos) este show, con muchas expectativas dado que era un nuevo proyecto de Joss Whedon -un realizador que ya tenía una larga historia con esta señal y con este medio- y que además con esta serie la cadena estrenaba el formato widescreen para t.v., y durante las primeras semanas de emisión se dieron dos situaciones: por un lado, las excelentes críticas recibidas por parte del fandom y de la prensa especializada, y por el otro un rating que estaba muy por debajo de lo que FOX pretendía. A favor de la cadena hay que decir que eran tiempos, cuanto mínimo, complicados para la misma: ese mismo año, en mayo, había finalizado uno de los caballitos de batalla de la misma, la serie de Chris Carter, The X-Files, que durante 8 temporadas mantuvo un promedio de 15 millones de televidentes (el mismo baja mucho en la novena y última temporada, aún habiendo tenido 14 millones de televidentes en el episodio final) y, al parecer, se esperaba algo parecido para la recién llegada creación de Whedon. Teniendo como referente al drama protagonizado por Kiefer Sutherland, 24, que en su primer temporada tuvo un promedio de 8,5 millones de televidentes, los números de Firefly estaban lejos de conformar a los directivos de la cadena (no lograba superar un promedio de 4 millones de televidentes) y se lo hacían saber al buenazo de Joss, animándolo a que modificara algunos aspectos de la misma para revertir esa situación.
Serenidad ante todo…
Como las alabanzas desde la t.v., la gráfica y la web (muy distinta a la actual pero ya con Blogs y Sitios de reviews sobre el medio) no dejaban de caer, y como la genialidad de Whedon es solo comparable con su testarudez, no cedió ante los “pedidos” o “sugerencias” de los popes de FOX y siguió con el curso que consideraba natural para la serie, confiando en que los números lo acompañarían. Pero además había algo más: MAGIA. Sí, magia. Whedon ya comenzaba a notar que tenía algo magnífico entre manos, la respuesta del público era positiva y afectuosa, y el ambiente en el que estaba trabajando no podía ser mejor. Todo el cast estaba muy contento y orgulloso con el trabajo que estaban realizando y con cómo se veía, luego, con la post-producción de los FX’s encima, edición y la deliciosa música de Greg Edmonson. Nadie en el equipo era ajeno al bajo rating, pero pocos esperaban lo que terminó sucediendo: luego de recibir los números de la emisión del capítulo 11, luego de solo 3 meses de que la serie estuviera al aire, la FOX anuncia oficialmente que la misma sería levantada, aún cuando el contrato inicial era para producir al menos 14 capítulos… esos tres capítulos restantes de todos modos se terminaron de realizar y pudieron ser vistos por primera vez en la edición en DVD de la serie. O sea: no solo FOX levantó la serie sino que ni siquiera emitió 3 de los capítulos por los que ya había pagado.
El dolor y la tristeza inundó a los actores y al resto del equipo involucrado en la producción de Firefly, Whedon en cambio estaba encabronado y enojado con la FOX. Se mostró dolorido pero animó a su tripulación prometiéndoles que encontraría la manera de que regresaran al aire. La reacción de los fans, que ya por ese entonces se autodenominaban Browncoats (en referencia a los soldados renegados de la Alianza que siguen deambulando por ese universo como soldados independientes o mercenarios), estuvo sintonizada con la de la producción, pero superó toda expectativa: inundaron la página oficial de FOX con reclamos por el levantamiento de Firefly exigiendo el retorno de la misma, y expandieron esa queja y ese pedido por toda la web. A través de foros, blogs y sitios dedicados a la t.v. y la ciencia ficción se hicieron oír, a veces argumentando con sentido común y nada más, otras de forma un poco más creativas, con movilizaciones y marchas, reuniones en lugares públicos cosplayeados, video-blogs ficcionales (recuerden que esto es pre-Youtube… si, mis amados lectores: hubo una época en la que no existía Youtube… yo tampoco puedo creerlo) y sobre todo usando como plataforma un sitio creado casi exclusivamente con el fin de resucitar la serie, browncoats.com. Apenas salieron a la venta los DVD’s la respuesta fue totalmente inversa a lo que había sucedido meses atrás con el rating, fueron un fenómeno en ventas, y Whedon, ni lerdo ni perezoso, no dejó que la depresión le ganara y salió a agarrar el toro por las astas, logrando convencer a Universal Pictures de producir una película para poder cerrar la serie.
Yendo de la cama al living… o de la pantalla boba al celuloide
Con arte conceptual realizado por Bernie Wrightson, Joshua Middleton y Leinil Francis Yu, el mismo casting de la serie y música escrita por David Newman e interpretada por la Hollywood Studio Symphony bajo la dirección del mismo Newman, la película se intituló Serenity y se estrenó en U.S.A. el 30 de septiembre del 2005, exactamente 3 años después del estreno de la serie, pero Nathan Fillion, el protagonista de la franquicia, confirmó que comenzaba la producción de la misma en Junio del 2003, en el foro oficial de Firefly en la web de FOX, para tranquilizar y emocionar nuevamente a los fans, ya que en parte esto era posible gracias a ellos. Con un costo cercano a los U$S 40 millones y un primer fin de semana de solo U$S 10 millones de recaudación en los cines, una vez más los malditos números no acompañaron un producto de gran calidad, al punto tal que Universal Pictures decidió retirar el estreno en salas de cines en siete países (incluido nuestro país, Argentina), y lanzarla ahí solamente en DVD, el cual comenzó a vender las primeras semanas del mes de abril del año siguiente.
La película retoma la trama unos meses después de donde la había dejado el capítulo 14 de la serie de T.V., y tiene un tono mucho más épico y oscuro que la misma, profundizando en aquellas cicatrices psicológicas y físicas que la última guerra dejó en varios de los tripulantes de nuestra querida nave. La carga de drama y acción están perfectamente balanceadas en el film, y no por ser más cruda evita esos diálogos que son tan característicos de Whedon y el sutil humor que llevan implícitos los mismos. Es un deleite para los fans y una película muy entretenida para el espectador ocasional, que ofrece un cierre más que digno a una saga que merecía concluir a lo grande. Al día de hoy no hay novedades acerca de una posible secuela del film, sin embargo en el especial que se emitió el 11 de noviembre del año pasado en el Science Channel donde se reunió a Joss Whedon y a parte del casting de Firefly/Serenity (muy recomendado para los fans de la franquicia; advierto que conviene mirarlo con un pañuelo a mano), todos se mostraron muy animados a que esto suceda tarde o temprano. El tiempo dirá…
Corazón de Oro
Permítanme terminar esta reseña contando algo absolutamente genial que da un broche de oro a esta anécdota y demuestra que de estos medios, de la ficción, y del amor que los fans profesan por una franquicia, puede salir algo positivo que trasciende el cine y la t.v. y afecta el mundo real en el que todos nosotros vivimos. En el primer semestre del 2006, una persona que se auto-denomina The One True b!X, en Portland, Oregon, organizó un evento para recaudar fondos para caridad, proyectando el film Serenity el día que Joss Whedon cumple años, el 23 de Junio. Como buen fan de la franquicia, compartió esta “idea” en la web… y se encontró con que la misma tuvo una repercusión imposible de anticipar: el “evento” fue clonado en varias ciudades de U.S.A, en Canadá, en Gran Bretaña, Australia y Nueva Zelanda, y en total recaudaron U$S 65.000. De ahí en adelante, todos los años, una vez por año, se realiza un evento anual que lleva como nombre Can’t Stop The Serenity, y que patrocinado por Joss Whedon, Nathan Fillion y un par de luminarias mas, se dedica a recaudar fondos para un puñado de organizaciones benéficas (principalmente Equality Now), y que, como está organizado por fans de la franquicia, no se detiene ahí: en el 2010 salió a la venta en DVD y BluRay Browncoats: Redemption, el primer fan film realizo por fans para fans, situado en el universo de Firefly, con una nueva tripulación, y con un único objetivo: que lo recaudado por las ventas de este fan-film vayan, una vez más, a la caridad. ¡JA! ¿Qué me cuentan? ¡En tu cara, FOX!
A New Ship. A New Crew. A New Adventure. Charity has never been this exciting!