Esta es una semana muy especial para quien escribe estas columnas, y voy a contarles el porqué: un jueves 11 de octubre del 2012 mi amigo
Saki ponía on-line mi primer reseña “oficial” en
Tierra Freak bajo un común-acuerdo que exigiría de mi parte el compromiso de entregar, como mínimo,
una entrada semanal. De ese día, esta semana se cumplen 4 años. 4 años consecutivos casi sin interrupciones escribiendo reseñas semanales para este sitio. 4 años en los que, por suerte, en estos medios que amo y consumo –cine, televisión e historieta-, pasó de todo, y la mayoría de las cosas altamente positivas, muchas de las cuales tuve el agrado de poder analizar y compartir con ustedes.
También ocurrió algo anecdótico ese día, mi primer reseña fue una review del piloto de la serie
Arrow, un show que, ahora a la distancia, bien podríamos considerar como el principal causante de una sobre-explotación de franquicias y temáticas super-heroicas live-action en la televisión moderna. No nos engañemos, han existido shows dedicados a este género desde los ’70 hasta acá, de manera casi ininterrumpida: la
Wonder Woman de
Lynda Carter que comenzó en el ’75 y culminó en el ’79, el inolvidable
Incredible Hulk de
Bill Bixby y
Lou Ferrigno que comenzó en el ’78 y terminó en el ’82 sumando 5 temporadas, y luego de un salto significativo llegamos a la
Superboy que estuvo al aire entre el ’88 y el ’92, la 1er serie de
Flash con solo dos temporadas en el ’90 y ’91, la serie de
Swamp Thing que se emitió entre el ’90 y el ’93,
Lois & Clark: The New Adventures of Superman (’93-’97), y luego de otro salto caemos en, por un lado, la
Smallville (2001-2011) y la
Birds of Prey (2002-2003) para
D.C., y por el otro una tibia
Mutant X para
Marvel que nadie vio, nadie registra y nadie recuerda y que así y todo se mantuvo al aire 3 temporadas entre el 2001 y el 2004. Luego de esta etapa hay un recorrido que quien más quien menos todos recordamos en mayor o menor medida, con grandes éxitos y estrepitosos fracasos signados por las series de
Blade,
Heroes,
Misfits,
No Ordinary Family,
Lost Girl,
Alphas,
The Cape y seguramente varios shows más que se me están escapando.
Sin embargo,
Arrow no es una serie cualquiera, no es un show más del montón.
Arrow fue la punta de lanza de un proyecto ambicioso por parte de los productores de
D.C./Warner que terminó gestando 2 spin-off, tuvo un personaje invitado 2 veces de una serie ya cancelada pero que podemos considerar dentro de ese universo, el cual ahora además incluirá de forma explícita la serie
Supergirl. Tal es la influencia que este show tuvo en toda esta movida que este universo común de D.C. en televisión se lo denomina
Arrowverse, justamente porque se considera a esta producción como la “serie madre”, y podemos criticar todo lo que se nos de la regalada gana a
Arrow, podemos hacerla mierda, bardearla con memes, imitar la voz ronca y jodida de
Oliver Queen cuando se pone la capucha cuantas veces queramos emulando posturas ridículamente forzadas y largando amenazas hartamente conocidas sobre el estado de su querida ciudad que hasta incluso ellos mismos terminan referenciando y auto-parodiando, pero la realidad es que no solo este show es el gestor de todo sino que los números del rating temporada a temporada lo siguen acompañando, cientos de miles de personas en el mundo se ríen de la misma pero la siguen viendo (hola, que tal, mi nombre es
Logan San) y digan lo que digan la semana pasada inauguró su 5ta temporada, amigo. Tomá para vos.
Dicho todo esto –demasiado largo para una introducción, pero entiendo el “evento” lo ameritaba-, esta semana en
Tierra Freak me voy a explayar sobre el comienzo reciente de las nuevas temporadas de 4 series que pertenecen a este sub-género: la ya mencionada
Arrow, su serie “hermana”,
The Flash ,
Supergirl y la, por el momento, única competencia televisiva que propone
Marvel Studios fuera de las propuestas semestrales de
Netflix,
Marvel's Agents of S.H.I.E.L.D..