La televisión del reciclaje: 5 próximos estrenos con olor rancio - La Columna de Logan.

“El público se renueva” es, además de una de las frases más trilladas relacionadas con el espectáculo, una verdad irrefutable que funciona muchas veces como una excusa perfecta para que las industrias del cine y le televisión presenten una y otra vez proyectos que ofrecen una puesta al día de una idea que ya fue explotada en alguno de estos medios con algo de éxito y, por lo tanto, cuenta con una base fija de fans que estarán sin duda alguna interesados en consumir esta “nueva” versión. Esta articulación de una vieja idea para presentarla de forma fresca y renovada y dotarla de elementos modernos es un recurso casi tan viejo como la prostitución, y no se aleja demasiado de las adaptaciones literarias o de historietas, máxime cuando muchas veces el producto va a ser presentado en otro medio. Si reflexionamos sobre el asunto, estamos hablando de lo mismo: agarrar una obra que fue consumida en un formato determinado, detectar cuales fueron los elementos que la dotaron de cierta importancia y la terminaron transformando en un producto cultural que cuenta con un valor agregado que trasciende a su época, y trasladar los mismos a otro formato, intentando mantener vivo el espíritu original de la misma.

En las últimas semanas han aparecido de forma casi simultánea avances de 5 shows televisivos próximos a estrenarse que, o son continuaciones inesperadas de series televisivas que tuvieron éxito y supieron dejar una huella en la memoria del público, o son adaptaciones de películas clásicas policiales, y luego está el caso del revival del show del muchacho insípido este compuesto por Richard Dean Anderson que a mediados de los ’80 y hasta los 1ros años de la década siguiente supo entretener a toda una generación haciendo uso de su inconmensurable sabiduría en conjunción con una inteligencia destacable para salirse con la suya utilizando elementos supuestamente cotidianos que tenía a mano.

MacGyver

Y ya que lo mencioné al final de la introducción, vamos con esta. Quien que acuse ya más de 30 años no puede tararear de forma automática la música del opening de esta serie mundialmente conocida que supo transformarse en un fenómeno cultural y contó con la sorprendente cantidad de 139 capítulos distribuidos en 7 temporadas emitidas entre 1985 y 1992 y dos films para televisión que fueron puestos al aire en 1994.

Lee David Zlotoff es el padre de la criatura, un guionista y productor que nunca más la volvió a pegar con absolutamente nada luego de que su hijo pródigo dejara de estar al aire, y al cual no pocas veces le entraron ganas de volver a resucitar a su adorable criatura. Richard Dean Anderson (éste sí la volvió a pegar con Stargate SG-1, ojo) fue el actor que dio vida a Angus MacGyver, un agente secreto (?) que trabajaba como analista para la Phoenix Foundation quien, a su vez, respondía a una agencia dependiente del gobierno yanquie, conocida como el Department of External Services (D.X.S., Departamento de servicios externos), toda una fumarola de inventos para justificar la existencia de este personaje que era un científico-matemático-químico-bioquímico-físico nuclear-ingeniero-electromecánico y vaya uno a saber cuantas cosas más. El cerebro de MacGyver funcionaba como si tuviera un acceso instantáneo a un combo de wikipedia + youtube, con un filtro para las estupideces y distracciones culturales que podemos encontrar en ambas plataformas, y su inteligencia por encima de la media le permitía hacer uso de toda esa enorme sabiduría para salir de prácticamente cualquier problema que se le presentase desarmando cosas que tenía a su alrededor y reorganizándolas para que cumplan otra función.

MacGyver tuvo varios intentos de volver a la vida, pero todos quedaron en la nada misma. Hubo un intento de la Warner por hacer una remake y llamarla Young MacGyver en el 2003, y hasta se llegó a filmar un piloto con Jared Padalecki como protagonista, 2 años antes de que comenzara su andadura con Supernatural, pero el mismo no tuvo una buena recepción y el proyecto quedó en la nada. Luego de esto se comenzó a barajar la posibilidad de hacer una película, aprovechando la movida de finales de siglo XX y sobre todo principios del nuevo de remake’s de series de T.V. clásicas en formato fílmico [Mission: Impossible (1996), Lost in Space (1998), Charlie's Angels (2000), I Spy (2002), Starsky & Hutch (2004), Bewitched (2005), The Dukes of Hazzard (2005), hasta llegar a las más recientes The A-Team (2010), The Green Hornet (2011) o 21 Jump Street (2012)], pero la misma iba a estar producida por Dino De Laurentiis, que fallece en el 2010, y las inútiles de su hija, Raffaella De Laurentiis, y su mujer, Martha De Laurentiis, no pudieron encontrarle la vuelta.

Ahora al menos tenemos un avance de una nueva serie, esta vez producida por la propia CBS, de potencial estreno a finales del segundo semestre de este año, con el creador original de la misma nuevamente involucrado, con Lucas Till (Alex Summers/Havok en las nuevas X-Men) dando vida al nuevo MacGyver, y con Peter Lenkov –showrunner y co-creador de la nueva Hawaii Five-0, otro reboot de una serie clásica de CBS de los ’70 y ’80- al frente de la misma. Y la verdad es que muchas cosas que vemos en este trailer pecan de ingenuas y otras casi causan vergüenza ajena viviendo los violentos años que estamos transitando y teniendo la ponderosa oferta televisiva actual repleta de shows de mucha calidad. Pero está el infaltable “cortaplumas” suizo, incluso en el logo de la serie, y entiendo que este es un show que emocionó a toda una generación, y generó incluso algo de interés o entusiasmo por la búsqueda de conocimientos a toda una camada de Nerds que seguramente se van a poner contentos al volver a revisitar los lugares comunes en los que sin duda alguna va a caer este fresco y renovado producto.

24: Legacy

No, no va a estar Kiefer Sutherland, no. Vamos a ver una serie de 24, de la FOX, y no lo vamos a tener a Jack Bauer como protagonista de la misma. ¿Qué, creían que lo más ridículo de esta entrada iba a ser lo de MacGyver? ¡JA!

FOX: soplame la quena, te lo pido por favor.

Pobre pibe, loco, el negrito este… tener que cargar con ese peso en su espalda. Es casi como ver una nueva Die Hard sin Bruce Willis, así de ridículo. Para el turista ocasional del sitio que no tiene la más pálida idea de a que me refiero cuando digo 24, tuve el honor y el privilegio de poder explayarme sobre la misma en mayo del 2014 cuando se estrenó lo que sería la 9na y última temporada –hasta el momento- de este show, la cual también tuvo título propio, 24: Live Another Day, la última aventura de nuestro agente favorito de todos los tiempos, el imbatible Jack BadAss Bauer, una de las personas con mas huevos del planeta, y alguien que no querés encontrarte si sos un puto terrorista. Entren y péguenle una leída a dicha reseña que vale la pena, le puse alma, corazón y vida a la misma, e intenté reflejar el porqué este show es uno de los pilares fundamentales de la televisión de acción moderna, y uno de los causantes de esta adicción a las series, no quizás el principal, pero sí uno muy importante. Su formato atípico y provocador, su temática polémica y sus personajes viscerales, crudos y en la mayoría de los casos duros como el acero hicieron de este un show clásico, histórico y de consumo masivo, que para colmo dejo un reguero de personajes muy queribles, casi todos muertos, mutilados de alguna forma o traumatizados de por vida. Poco más que agregar sobre esta serie sin redundar, la cual ahora regresa con un spin-off que promete retomar el formato anterior y tiene pinta de entregar, una vez más, toneladas de acción.

Pero, claro, no está Jack, y ese es un factor que, en este caso, resta. Bauer era el alma de la serie, la composición que hizo Sutherland de este agente de la C.T.U. (Counter Terrorist Unit - Unidad antiterrorista) fue magnífica, y no solo es una opinión personal: ganó un Golden Globe por este papel en el 2001, estuvo nominado al Emmy 7 veces y tres veces el sindicato de actores le acercó una estatuilla ganadora, también por su caracterización de Jack Bauer.

Pero bueno, olvidémonos de este detalle y confiemos en la sabiduría del mismo Kiefer Sutherland que oficia una vez más como productor ejecutivo de esta nueva entrega, junto a Manny Coto y Evan Katz, que además de cumplir esa misma labor serán los showrunners de este viaje, repitiendo además este desafío como ya lo hicieran en la excelente 24: Live Another Day. Esta vez el tiempo en contra lo tiene Corey Hawkins [hizo de Dr. Dre en Straight Outta Compton (2015) y clavó un secundario que duró 5 capítulos en The Walking Dead], quien dará vida a Eric Carter, un ex-Ranger retirado que vive plácidamente en Virginia con su jermu Nicole y se ve involucrado en lo que podría ser el atentado en suelo yanquie más grande de la historia, razón por la cual termina recurriendo obviamente a la C.T.U.

El estreno de 24: Legacy está previsto para el 5 de febrero del 2017.

Training Day

En Tierra Freak más de una vez he mencionado a Antoine Fuqua, un director más que interesante que no solo cuenta con un listado considerable de buenas producciones de acción [desde la The Replacement Killers (1998) de Chow Yun-Fat y Mira Sorvino hasta la Tears of the Sun (2003) de Bruce Willis y Monica Bellucci, por no mencionar que estuvo detrás de otra adaptación al cine de

una serie de T.V., The Equalizer (2014), con Denzel Washington y Chloë Grace Moretz] sino que además te puede sorprender con cosas como su Southpaw (2015) del año pasado, otra vuelta de tuerca a la historia del boxeador caído en desgracia que tiene que encontrar la forma de levantarse y hacerse cargo de su legado, con Jake Gyllenhaal y Rachel McAdams. A pesar de que su carrera tuvo una considerable inclinación por el cine de acción, Fuqua es un realizador con una sensibilidad enorme, y eso se deja ver en el desarrollo y el espacio que le da a los dramas humanos dentro de sus producciones, y la muñeca que tiene para partirte al medio en los momentos más dramáticos. De todas sus películas, la más recordada al día de hoy sigue siendo Training Day (2001), aquel drama policíaco que le valió un oscar a Denzel Washington y una nominación a Ethan Hawke, como no, y que contó con aportes de personajes caracterizados por una muy joven Eva Mendes, Tom Berenger, e inclusive de los raperos Dr. Dre y Snoop Dogg y de la cantante Macy Gray, quienes además contribuyeron con el soundtrack de dicha producción, ya que, otra cosa que caracteriza a este director es no solo su buen gusto para seleccionar los cortes comerciales que van a acompañar el film sino también una inclinación evidente por el tipo de melodías que realiza, escucha y disfruta la comunidad afroamericana de U.S.A.

Aquel film, que contó con guión de David Ayer -mejor conocido como el pibe que con su Suicide Squad va a tener que levantar el tomuer que dejó Snyder-, sirve como inspiración y plataforma de lanzamiento para una nueva producción CBS, con Jerry Bruckheimer como productor ejecutivo, pero en vez de articular como un reboot o una remake de la historia original, va a funcionar como una rara secuela en la cual los roles estarán invertidos: esta vez el policía corrupto y maduro será caracterizado por Bill Paxton [Apollo 13 (1995), Twister (1996), A Simple Plan (1998), Edge of Tomorrow (2014)] y el cana novato y honesto que se va a desayunar no sin un dejo de sorpresa la falta de ética y la cuestionable moral en el accionar diario de su compañero y guía estará personificado por un pibe afroamericano que no conoce nadie de nombre Justin Cornwell. Y deduzco más que “Día” de entrenamiento será, como mínimo, unas semanitas, a menos que los productores también se inclinen por manejar los tiempos casi como si se tratara de la serie 24, cosa que dudo mucho.

Originalmente se rumoreaba que Fuqua iba a dirigir el piloto, un clásico en esto de las series actuales, donde ciertos directores de renombre en el cine suelen contribuir con sus habilidades en ese rubro para algunos pilotos de ciertos lanzamientos, pero al final otras obligaciones contractuales le impidieron hacerlo, aunque de todos modos figura como productor ejecutivo de la misma. También se habló de que Ethan Hawke iba a regresar con su personaje, al menos para el piloto, con algún tipo de cameo, para darle coherencia a la “secuela” y funcionar como puente o bisagra de ambos relatos… otro chisme barato que no se terminó dando, lo cual nos lleva a pensar que Bruckheimer es un completo inútil cuando se trata de cebar al público con elementos del film original. El avance no es malo, salvo por el remate, que muestra una vuelta de tuerca que, no por original, termina siendo verosímil o atractiva. De hecho, pude ver este avance en compañía de algunos amigos, y todos tuvieron la misma reacción que yo: abucheo. Ojalá me equivoque, porque la película a la que esta serie pretende honrar realmente es un clásico imbatible.

No hay fecha de estreno confirmada al día de hoy para este show.

Lethal Weapon

Otro clásico imbatible del cine de acción de los ’80, piedra fundacional de una saga que se extendió quizás demasiado (3 secuelas) pero que en todas dio lo mejor de cada integrante y no hay una sola que no sea entretenida y dramática, Lethal Weapon (1987) es el perfecto manual de cómo hacer una buena buddy cops movie. El inmenso Richard Donner en la dirección orquestando un guión de Shane Black, con un muy joven Mel Gibson y un inolvidable y muy querible Danny Glover que

siguió riéndose de esta saga hasta el día de hoy (tiene un personaje secundario en el film Gridlocked (2015), un cana encargado de la seguridad de unas instalaciones para entrenamiento de los SWAT, y en un momento dado tira la frase I knew I was getting too old for this shit, una referencia directa a un latiguillo clásico de su personaje en Lethal Weapon), música de Eric Clapton y producción de Joel Silver [Die Hard (1988), Predator (1987), Commando (1985), 48 Hrs. (1982), Hudson Hawk (1991), Demolition Man (1993), The Last Boy Scout (1991), Assassins (1995), Conspiracy Theory (1997), la trilogía de Matrix y decenas de excelentes películas más], Lethal Weapon se transformó en un clásico instantáneo, una película de culto y un referente del género de esos años, y el personaje de Gibson, Martin Riggs, pasó a la historia como uno de los mejores “policías loquitos” del cine.

Lethal Weapon es una saga preciosa y gigantesca, y quizás algún día la honre con una entrada propia en este sitio porque claramente lo amerita, y porque tiene mil y un elementos dignos de contar, mencionar y resaltar, pero además porque detrás de lo que vimos en pantalla también se tejieron mil y un historias y anécdotas geniales que justifican el “alma” que esta saga tiene. Salvo por Shane Black, que solo regresó para volver a colaborar con el guión de la secuela, el resto del equipo se mantuvo intacto hasta el final de la saga, con Donner siempre a la cabeza dirigiendo la batuta, e incorporando personajes secundarios en cada secuela que crecerían y terminarían conformando una gran familia, pero además con detalles deliciosos como por ejemplo el hecho de que Traci Wolfe, una de las actrices que dio vida en las 4 películas a una de las hijas de Roger Murtaugh, el personaje de Glover, misma que terminó “coqueteando” con el personaje de Gibson, no volvió a trabajar como actriz ni en cine ni en televisión una vez finalizada esta saga, por decisión propia, aún cuando tenía las puertas abiertas para hacer lo que quisiera, sino por sus dotes actorales al menos por su belleza y su carisma. 

Y salvo por un par de participaciones televisivas, previas a la finalización de esta saga, no tiene otros trabajos en estos medios. O también el hecho de que Lethal Weapon 4 (1998) significara el desembarco fuerte de Jet Li en U.S.A., aún cuando en el film le dio vida a un villano tan temible como detestable.

Con toda esta carga encima, FOX se la juega y se larga a co-producir junto con Warner una serie que adapte las aventuras de Rigs y Murtaugh, ahora personificados por Clayne Crawford [Jericho, 24] y Damon Wayans respectivamente, este último con 55 años encima, aunque cueste creerlo. El piloto está dirigido por McG [Charlie's Angels (2000), We Are Marshall (2006), Terminator Salvation (2009), 3 Days to Kill (2014)] y el guión hace una traslación casi literal de muchos de los momentos más recordados del primer film de la saga, aunque tengo que admitir que, al menos por lo que se deja ver en el avance, la química entre ambos protagonistas está lejos de emular la que logró la pareja original, por no mencionar el hecho no menor de que la cara de loco desquiciado de Gibson con esa mirada punzante, fría y provocadora es casi imposible de reemplazar, mucho menos de parte de este metrosexual del nacional B con su bigotito ridículo y su falsa sonrisa compradora. Pero hay algo ahí, en algunas escenas, en un par de momentos, que permiten un atisbo de esperanza.

El estreno está previsto para finales de este año o principios del 2017.

Prison Break: Sequel

Noticia de último momento: Michael Scofield no está muerto. ¿Y de qué te asombras, amigo? Sara Tancredi tampoco estaba muerta, aún cuando habíamos visto su cabeza en una caja, Se7en style. Nunca des a nadie por muerto realmente en Prison Break, ¿estamos?

Bueno, es así, poco para agregar, la verdad. Vuelve la alegría (?), vuelve Prison Break, uno de los mayores éxitos de FOX de la última década y media, aún cuando solo tuvo 4 temporadas, y sobre todo cuando la calidad de la misma tuvo un descenso enorme. Hay una distancia gigantesca entre la trama casi ajedrecística de la primer temporada y los esbozos de historia pseudo-policial conspirativa de las otras tres, pero sin duda alguna la que más agua hace es la 4ta, que es casi un chiste, una tomada de pelo para el televidente, para el fan, y lo más lejos posible de lo que alguien con sentido común considera un “cierre digno”. Es todo lo contrario a “digna” la despedida de los queridos Michael Scofield, Lincoln Burrows, Sara Tancredi y compañía. Y ahora, para colmo, con este regreso que nadie pedía y mucho menos esperaba, le quitan relevancia a uno de los pocos elementos coherentes que tuvo ese final.

Pero, aunque cueste creerlo, el avance genera expectativas, y realmente si alguna vez tuvimos un dejo de aprecio por estos personajes y esta historia, los productores logran su objetivo: tenemos ganas de ver este retorno. Para los que no saben a que carajos me estoy refiriendo, Prison Break en su primer temporada nos presentaba a Michael Scofield, un brillante ingeniero caracterizado por Wentworth Miller, el cual, entre otras cosas, había ayudado a diseñar y construir una cárcel de Máxima Seguridad, y cuando comienza la serie comete un crimen para hacerse encerrar en la misma y así lograr el escape de su hermano, Lincoln Burrows, en la piel de Dominic Purcell, injustamente condenado a muerte. Es así como el tal Scofield, que está completamente tatuado con diseños a primera vista abstractos y poco figurativos, capítulo a capítulo nos va revelando su plan de escape, el cual tiene múltiples vueltas, las cuales están signadas por dichos diseños insertos de por vida en su piel. La primer temporada es, sin duda alguna, de lo mejor que estaba entregando la televisión en esos años, pero lamentablemente la calidad de la misma cayó en picada al año siguiente, apenas levantó algo de vuelo en la 3er entrega y terminó haciendo agua, chocando y estrolándose contra un bloque de concreto en una 4ta temporada tan ridícula como absurda, con un contexto inverosímil y personajes completamente desdibujados, y así, sin poder encontrar nunca el rumbo y el tono de aquella añorada primer entrega, se despidió.

Ahora vuelve a ser protagonista una cárcel, ubicaba en Marruecos, en la cual se encuentra Michael, y Sara y Lincoln arman un dream-team para poder rescatarlo de la misma, equipo que incluye exponentes de la talla de Theodore "T-Bag" Bagwell, un personaje perverso con un accionar psicópata y además pedófilo, ¿no? Alguien que claramente nos encantaría tener de vecino, seguro.

Para ir cerrando esto, el detalle cuasi-morboso de esta producción me lo reservé para el final: el actor Dominic Purcell, filmando una escena para esta serie en la ciudad de Uarzazat, al sur de Marruecos, sufre un accidente que termina afectándole la mitad del rostro, de manera tal que incluso partes óseas del mismo quedaron levemente expuestas, razón por lo cual la producción lo traslada a un hospital de dicha ciudad. Al ingresar en las instalaciones la infraestructura médica era tan precaria y el equipo de médicos en la sala de cirugía se mostraba tan desorientado hacia el camino óptimo que tenían que seguir para tratar con sus heridas, que el actor así, solito, aún en estado de shock, se levantó de la camilla y se retiró, con la mitad de la cara aún hecha bosta. La FOX, a sabiendas de lo que se le venía encima si no reaccionaba rápido, puso a disposición del actor un helicóptero, y rápidamente lo trasladaron a Casablanca, ciudad situada al oeste del país, la cual es la capital de la región del Casablanca-Settat. Y ahí sí pudieron por fin realizarle las intervenciones necesarias para poder dejarlo casi como nuevo. Casi. 

FOX tiene planes de estrenar esta serie también a fines de este año, pero lo que sí ha confirmado es que el formato en el que la presentarán contará con la módica suma de solo 10 capítulos, algo que es de agradecer si esperamos que la misma no se alargue ridículamente y pueda contener una trama más coherente y pensada. Nos leemos nuevamente la semana que viene, acá, en Tierra Freak.