Xenozoic Tales: Cuando el Pasado vuelve en el Futuro - La Fortaleza de Kal.

En un planeta Tierra asediado por múltiples inclemencias naturales y artificiales, la humanidad se ve forzada a construir grandes ciudades subterráneas en las que sobrevive por 600 años, para emerger y descubrir un mundo que ha cambiado al punto de que misteriosamente parece haber regresado en el tiempo. Especies que habitaran el planeta en los albores de la vida pululan una vez más por la superficie reclamándola como suya, haciendo de este un mundo salvaje y hostil en el que una vez más reina la naturaleza. En esta nueva era la tecnología es muy limitada y aquellos que la dominan reciben un enorme respeto y poseen gran influencia. Bienvenidos a un mundo de feroces bestias y motores rugientes; un mundo de Cadillacs y Dinosaurios.

¿Les suena más ese nombre? Tal vez muchos recuerden a la franquicia por aquel mítico arcade que supo alegrar la infancia de más de un niño de los 90’s o la corta pero querida serie animada que llevaba el mismo título. La historia y los personajes eran más o menos iguales y ambos tuvieron su origen en la década de 1980 en Xenozoic Tales, de Mark Schultz.  

Death Rattle. 

Primera publicación de Xenozoic Tales.

Schultz se nutrió fuertemente desde temprano de historias Pulp con personajes como Tarzan y fue un profuso admirador de artistas como su creador Edgar Rice Borroughs, Robert E. Howard y su emblemático Conan y artistas legendarios como Frank Frazetta, Hal Foster y Will Eisner. En su trabajo se pueden reconocer fuertes influencias de todos estos próceres de la fantasía, así como un estilo muy marcado por los cómics de EC Comics. 

El trabajo de Schultz en este mundo post-apocalíptico comenzó a publicarse en el cómic de antologías “Death Rattle,” con la historia corta “Xenozoic!” en 1986, donde se nos presentaba todo este contexto en tan sólo 12 páginas. Pronto le siguió Xenozoic Tales #1, en febrero de 1987. La serie, publicada originalmente por Kitchen Sink Press, duró tan sólo 14 números, viendo su última fecha de publicación en octubre de 1996. Posteriores reimpresiones del trabajo de Schultz llevaron el mismo título de sus contrapartidas en animación y videjouegos, Cadillacs y Dinosaurios, con la aprobación de la empresa automotriz General Motors, que por cierto posee los derechos de ese título. La palabra “Xenozoic,” por su parte, es una construcción debida a la nomenclatura de las distintas eras geológicas de nuestro planeta, tales como la Era Paleozoica (Vida Antigua) o la Mesozoica (Vida Intermedia) y etimológicamente quiere decir algo así como “Vida Extraña.” Son, a fin de cuentas, tiempos de vida extraña.  

Las aptitudes de Schultz como dibujante exceden cualquier tipo de consideración crítica, pero es sobre todo un gran narrador de historias, tan entretenidas como cautivadoras, dotadas de fuertes dosis de aventura balanceadas con un sólido trasfondo filosófico. Sus guiones para Xenozoic Tales presentan en este último plano una serie de características que los vuelve memorables. Tal vez lo principal a destacar es la gran definición que existe de sus dos personajes principales. 

Xenozoic. 

Publicado por Flesk Publications en

2010 con este nombre, el robusto

volumen contiene la totalidad

de la obra de Schultz pero carece

de las historias cortas dibujada

 por el artista Steve Stiles.

En este nuevo mundo, Jack “Cadillac” Tenrec es un mecánico devenido en una especie de chamán con una perspectiva sustentada en argumentos metafísicos y oscurantistas, que contradictoriamente se complementan con el pragmatismo de un ingeniero, ya que podríamos ver el saber físico de un ingeniero casi como un contrapunto absoluto de una inclinación metafísica. Tiene un pensamiento ecológico que roza el fanatismo, teniendo en el balance natural de las cosas un anclaje ideológico, místico y en definitiva político, lo cual lo lleva a chocar fuertemente con figuras que ostentan o desean el poder en el entorno en el que se mueve. Su concepto de la humanidad es el de una especie integrada en un ecosistema sujeto por pilares débiles que lo conducen hacia la entropía, al caos. Es curioso, pues, que para él pareciera ser preferible favorecer el oscurantismo y la ignorancia, tanto en la masa de la población como en su casta dominante, en la que por cierto él mismo se encuadra. El ideal vendría dado por un equilibrio entre una naturaleza mística y una humanidad ignorante, cumplidora de sus leyes. Por lo demás es un clásico héroe de acción Pulp, varonil, atrevido y con un fuerte sentido de la justicia, que por otro lado está dispuesto a tomar otra vida por lo que cree.   

Por otro lado, Hannah Dundee representa el espíritu científico, el apetito por conocimiento y el desprecio a los prejuicios y creencias prefijadas, lo cual sirve como contraste con la perspectiva mística de Jack. Tiene una mente racional, humanista y analítica, atraída como un imán por el conocimiento científico, que está representado en la historia por una gigantesca biblioteca oculta en la inundada ciudad que fuera la ciudad de Nueva York. Esa gigantesca biblioteca-museo funciona como una metáfora y esconde buena parte de la sabiduría humana anterior al cataclismo que destruyó al mundo en el Siglo XXI, por lo cual Hannah considera que podría contener las claves para salvar el presente. Mientras que para ella sólo esconde saber, para el espíritu “dogmático” de Jack contiene las causas de la destrucción del mundo anterior y por lo tanto son conocimientos que deberían ser prohibidos. Pero Schultz no se queda en un enfrentamiento de perspectivas maniqueas entre sus dos personajes centrales, al dotarlos de temperamentos permeables, para que la dinámica de sus distintas posiciones ideológicas los revista con un cierto magnetismo que genera una atracción irresistible entre ambos, atracción que inevitablemente los acerca en el plano físico. 

Grith. 

Xenozoic Tales #3, Kitchen Sink Press.

El elenco de la serie se completa con un repertorio variado de personajes que acompañan a nuestros protagonistas, entre los que se encuentran Mustapha Cairo, un ingeniero altruista que es uno de sus principales aliados, Hermes, un Alosauro criado y domesticado por Jack, y los Grith, una especie de humanoides presuntamente evolucionada a partir de los reptiles que poseen habilidades psíquicas y sólo pueden ser vistos por quienes eligen, honor que les conceden a nuestros protagonistas. También cabe mencionar entre los protagonistas a sus maravillosos paisajes y las criaturas que los habitan. El mundo xenozoico es una amalgama de ciudades derruidas, paisajes extensos, animales de todas las épocas y una vegetación sobredimensionada. Ese panorama apabullante, testimonio de la sabiduría y voluntad de la naturaleza, es el que justifica el ardor ecológico de Jack y le concede su libertad y su amor a los espacios abiertos. Es también un instrumento que Hannah utilizará para atraer a Jack a su forma de ver la vida, al manejarse en ese terreno con su misma efectividad, en labores de exploradora, pescadora o tiradora, lejos de cualquier tipo de estereotipo de “damisela en apuros.” En esa atmósfera casi de lujuria se da el acercamiento de posturas entre los protagonistas, y constituye el detonante de la seducción y el enamoramiento.

Esta nueva versión de la humanidad tiene también sus propios códigos y lenguaje y ha optado por denominar a lo que nosotros conocemos como “Dinosaurios” como “Slithers.” Así, cada especie de Slither tiene un nombre distinto a lo que tal vez estamos acostumbrados, así seamos paleontólogos o meros consumidores casuales de cultura popular. Los Tiranosaurios Rex son conocidos como Shivat (y sus genitales son altamente valorados en el mercado negro), los Mack son Triceratops y Zeke refiere a los Pteranodones. Hay un cuidado meticuloso en la construcción de la mitología en el trabajo xenozoico de Schultz. Lo más sabroso estará para el lector entrenado en encontrar las sutiles referencias, como en la nomenclatura que refiere al Ceratosauro, conocido en este mundo como Krenkel, posiblemente en referencia a Roy Krenkel, mítico ilustrador ganador del premio Hugo, recordado por sus trabajos en revistas de ciencia ficción y claro referente para el trabajo de Mark Schultz. 

Los opuestos se atraen.

 Xenozoic Tales #12, Kitchen Sink Press.

La estructura narrativa de Xenozoic Tales atraviesa una evolución en su estilo que va desde guiones esquemáticos en los primeros números (en marcado tributo a EC Comics/ Warren Publishing), pasando a ser más descriptivos, cargados de texto, para finalizar en el relato de aventuras y el melodrama que caracterizan a los últimos números de la obra. Schultz no olvida sembrar subtramas con la idea de configurar una historia de mayor contenido argumental conforme progresa la historia, pero en tanto efectivo, deja un cierto sabor amargo al saber que la serie fue cancelada sin una resolución concreta en su número 14, en el pináculo de la madurez artística de su creador. 

En líneas generales, el estilo visual de Schultz es de tendencia realista y evoluciona en ese sentido. Como comentamos más arriba, la adaptación de influencias en el estilo viene desde las publicaciones de EC, pasando por grandes maestros clásicos como Harold Foster y su Prince Valiant, Will Eisner en The Spirit y Alex Raymond en Flash Gordon, por si cabía alguna duda de los orígenes eminentemente Pulp de la obra. Capítulo aparte merece el nivel de excelencia que tiene en el diseño de las distintas especies animales que pueblan sus selvas interminables. Cabe destacar que ilustraciones de Schultz han acompañado publicaciones científicas, reconstruyendo la apariencia de dinosaurios reales. Los varios tipos de dinosaurios presentes en Xenozoic, al igual que el resto de la fauna extinta, presentan una morfología y aspecto propuestos por los paleontólogos de la época, comprobable revisando libros y estudios divulgativos sobre el tema. También es notable el trabajo que tienen los Cadillacs (concretamente el Coupe de Ville de 1950, insignia de la casa), con sus ligeras adaptaciones mecánicas, ya que en un mundo sin combustible fósil, nuestro héroe motoriza su emblemático vehículo utilizando excremento de dinosaurio. 

01.  Xenoceratops.

 Ceratópsido del Cretáceo Tardío

descubierto en Canadá.

Ilustración de Mark Schultz.

El éxito de Xenozoic Tales fue moderado, tal vez algo truncado por los largos períodos de tiempo tomados por su autor para realizar cada nueva entrega, que pasó de ser bimensual a indefinida, tomándole casi diez años para completar tan sólo 14 números que, para colmo, (tristemente) jamás llegaron a culminar propiamente. Su paso al mundo de los videojuegos y la televisión ciertamente ayudó para acercar la obra a la cultura popular y motivó la lectura del material de origen en más de uno (entre quienes se incluye quien escribe). 

El recordado arcade de Capcom data de 1993 y fue conocido en Japón como Cadillacs Kyoryuu Shinseiki (algo así como “El Nuevo Siglo de los Dinosaurios”). La modalidad de juego era de beat’em up y sirvió como tie-in a la serie de televisión del mismo nombre emitida entre 1993 y 1994 por el canal CBS. Ambas versiones de la franquicia tomaban muchos elementos del cómic y creaban su propia versión. Si bien la serie estaba apuntada a un público algo más amplio que el cómic, de manera similar a su material de origen trataba fuertes cuestiones ambientalistas y políticas. Si alguien tiene interés en volver a verla o hacerlo por primera vez, se encuentra disponible entera en el canal Nelvana Retro en Youtube:

En términos generales, la franquicia en la que se convirtió Xenozoic mantiene un nivel de calidad bastante sólido en todas sus versiones, si bien se siente algo inconclusa literal y metafóricamente, como si nunca hubiese podido llegar a explotar todo su potencial en ninguna de las áreas en la que buscó desarrollarse. ¿Quién sabe? Tal vez con el renovado interés en los dinosaurios que parece haber generado el estreno de Jurassic World este año, estemos un poco menos lejos de ver algún día una adaptación fílmica de esta historia, que de momento se sigue manteniendo como un hit de culto. 

Pantalla de selección. El arcade de Cadillacs y Dinosauriosse podía jugar de hasta tres personas y se podía elegir entre cuatro personajes con categorías distintas: Jack (balanceado), Hannah (ágil), Mustapha (rápido) y Mess (fuerte).