miércoles, 4 de noviembre de 2015

“The Last Witch Hunter”, la nueva de Vin Diesel - El Gabinete del Dr. Morholt.



El tiempo pasa inexorablemente para todos, también para los productos culturales que el clásico habitante de esta Tierra Freak consume con avidez.

Por eso es que no debemos olvidarnos de que todas las cosas que formaron nuestros gustos en nuestra niñez son productos de una época y no se los puede descontextualizar.

También es cierto que si bien muchos contemporáneos pudimos haber crecido viendo Mazinger Z a la mañana antes de ir al colegio, sólo los nerdos en serio o lo siguieron disfrutando años después o se interesaron en encontrar las historietas del gran Go Nagai.

En otras palabras (y parafraseando a un amigo) “que hayas crecido viendo Mazinger Z no te hace nerdo, sólo quiere decir que creciste en Argentina en los 80s.”

Pero hay algo que no podemos obviar y es que el recambio generacional es algo inevitable.



Seguramente el enorme Charles Chaplin leyó la literatura suficiente y vio las obras de teatro necesarias como para querer ser actor y director de sus maravillosas películas, pero es muy difícil que haya leído una historieta.

Del mismo modo, y yendo a un plano más cercano a nosotros, Stan “The Man” Lee seguramente leyó mucha historieta en su juventud y vio la cantidad necesaria de cine y seriales como para solicitar un trabajo en la vieja Timely Comics, pero seguro no jugó ningún video juego.

Por esto mismo cualquiera que haya disfrutado en su niñez de las películas de Chaplin y los comics de Lee va a tener una visión totalmente distinta de la realidad que la que tuvieron esos mismos artistas.

¿Pero qué pasa entonces cuando las riendas de la creación las toman aquellos que se declaran fanáticos de alguno de los mundos fantásticos que consumieron en su niñez, pero que también siguen consumiendo al día de hoy?

“The Last Witch Hunter”, la película que se estrena en nuestro país este jueves, es exactamente eso. El resultado del fanatismo que tiene el actor Vin Diesel con el universo del juego de rol “Dungeons and Dragons”.

Porque podemos verlo rudo, musculoso, pelado y preparado para patear traseros, pero Vin Diesel es a tal punto fanático de los juegos de rol que durante los tiempos muertos en las filmaciones de sus películas enseña a jugar rol a sus compañeros y les dirige aventuras.

Y “The Last Witch Hunter” nació directamente de una charla que Diesel tuvo con el guionista Cory Goodman sobre “Dungeons and Dragons” y el personaje que Diesel viene jugando por más de 12 años, un elfo oscuro cazador de brujas llamado Melkor “Siempre me ha atraído la idea de hacer una película fantástica de acción y hace cinco años estábamos charlando con Cory sobre DyD y antes de darnos cuenta, nos encontramos con un guión alucinante sobre un cazador de brujas.”

¿Qué tan difícil podía ser el vender un proyecto cinematográfico protagonizado por Vin Diesel que lo apasione tanto como para tomarlo como un proyecto propio desde el principio?

Nada difícil, claro está, más sabiendo que luego de la saga “The Fast and the Furious”  Diesel es una figura por demás convocante.

Así fue que se generó todo un universo nuevo donde el personaje de Diesel pudiese jugar. La cosa es que el nombre Melkor está registrado por ser parte del universo de “The Lord of the Rings” por lo que le cambiaron el nombre… y ya no era un elfo… y la historia ocurría en el presente. Pero bueno ¡todavía es un cazador de brujas!

En la película se nos plantea que las brujas (o hexan) son una antigua raza distinta de la humana que extrae energías espirituales de los cuatro elementos y que tienen poderes… mágicos, obviamente.
El problema con los hexan es que luego de un tiempo aparecen en la Tierra los humanos que no respetan a la naturaleza como ellos sino que la intentan someter por lo que empieza un conflicto que dura siglos.

Y es durante la Edad Media que los hexan dan el golpe final a la humanidad creando la peste negra, esa plaga que mató a más del 60% de la población de Europa.

Obviamente algunos humanos, miembros de la “Hermandad del Hacha y la Cruz” contraatacaron y Kaulder (tal el nombre del protagonista) es uno de los miembros de la misión más arriesgada: matar a la Reina de las Brujas y así terminar con la peste negra.

Obviamente Kaulder es el que lo logra (o sea, es el protagonista y todo esto pasa en los primeros 10 minutos de la película), sólo que antes de morir la Reina de los hexan lo maldice… con la vida eterna.

Ya en el presente, y gracias a esa victoria contra la Reina, se llega a una especie de tregua en donde es el mismo Kaulder quien es el garante de que los hexan no se pasen de la raya (y en el caso de que lo hagan, también es el encargado de capturarlos y llevarlos antes el Consejo de las Brujas, quienes darán castigos ejemplares para que la tregua siga existiendo.

Una de las cosas más interesantes de la película es que los hexan no están representados como en el imaginario popular (es decir a lo Disney), sino más bien como en realidad son los que profesan la religión de la Wicca (ese culto inventado en 1954 que practicaban las protagonista de la película “The Craft” o las de la serie “Charmed”).

La acción de la película se basa, entonces, en cómo reaccionará la “Hermandad del Hacha y la Cruz” y el mismo Kaulder cuando algunos hexan rompan la tregua.

Esta entretenida historia está dirigida por Breck Eisner (del cual sólo se recuerda la película “Sahara” con Matthew McConaughey y Penélope Cruz) y a Vin Diesel lo acompañan Elijah Wood, Michael Caine y Rose Leslie (la pelirroja cuya frase “No sabes nada John Snow” ya nadie extraña en la serie Game of Thrones).

Porque sí, es una historia entretenida, con acción, magia y principalmente con un Vin Diesel con 800 años de experiencia e inmortal descabezando malvadas brujas ¿qué más podemos pedir?
Quizás el tiempo pase inexorablemente para todos, pero no para Kaulder el inmortal, que no será un Highlander, pero nos asegura esas dos horas de esparcimiento para alejarnos de la aburrida realidad de este mundo en que vivimos donde nadie cree en las brujas… pero que las hay, las hay.