miércoles, 16 de abril de 2014

Divergente, la película que es mejor que la novela (y eso no es mucho decir) - El Gabinete del Dr. Morholt.



- Nota LIBRE de SPOILERS -

La grosa de Manipuladora habló ayer de una nueva película adaptada de una novela y parece que o la industria del cine vio una veta importante en las sagas de novelas (lo que le asegura que si tiene éxito la adaptación una continuidad de estrenos) o que el ambiente literario fue mutando para que todos sea “una saga” en vez de sólo un libro (y así poder vender los derechos para que alguna productora de cine los adapte a la pantalla grande).

Sea como sea, gracias a la gente de Alfa Films pude ver el preestreno de “Divergente”, que se estrena en la Argentina el día de mañana, la película basada en la obra homónima de la autora Veronica Roth, que la escribió cuando tenía sólo 23 años.

Y el dato de que la autora ahora tenga 26 años y que su novela escrita en 2011 ya tenga una adaptación cinematográfica, dice mucho de la historia que cuenta.


 
Sin entrar en detalles (porque últimamente llegamos al punto en que un spoiler es más terrible que el insulto a nuestra madre), en un futuro luego de una guerra cierta parte de la sociedad se divide en 5 facciones para lograr la paz y poder convivir sin conflictos.

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     Están los de Erudición (o Sabiduría, como le dicen en la traducción de las novelas), que son aquellas personas que creen que todos los males del mundo son debido a la ignorancia. Es por eso que todos los miembros de esta facción cultivan el conocimiento ante todo.

Por otro lado está la facción llamada Cordialidad (Concordia en las novelas), cuyos miembros creen que sólo a través de la tranquilidad, la bondad, el perdón y la neutralidad se puede ser mejor persona y no caer en la guerra y el conflicto.

       Los miembros de Verdad (Sinceridad en las novelas) son los que culpan al engaño como el peor defecto de la naturaleza humana, por lo que no sólo siempre dicen la verdad, sino que también lo que piensan en todo momento. No tienen filtros porque la simple idea de tener un filtro es para ellos una posibilidad de engaño.

-          La facción Osadía (traducido como Intrepidez en las novelas) tiene a los miembros  que creen que todo el mundo sería distinto si todos fuesen valientes y dejaran de lado sus miedos. Justamente por esta característica son los encargados de defender a la sociedad toda de las amenazas externas. Son sus soldados y protectores.

      Por último está la facción Abnegación (igual en la novela) donde sus miembros creen que el problema de la humanidad es el egoísmo, por lo que cultivan el olvido de sí mismo y el servicio a los demás.

Pero lo interesante de esta organización social es que cada persona que cumple 16 años, más allá de la facción en la que creció, tiene que elegir a qué facción unirse. Se desarrolla así una idea básica de cualquier adolescente de acatar las normas o rebelarse ante ellas. Aceptar el mandato social o hacer un camino propio con decisiones que cambiarán para siempre su vida (y acá se entiende que la Roth haya ideado este universo cuando estaba entrando en los 20 años).

Esa misma visión que hizo que muchos percibiéramos The Matrix como una obra que habla sobre el conformismo y la posibilidad de ser más de lo que la sociedad quiere que seamos, se ve en esta historia… pero claro, no de la manera con la que los hermanos Wachowski nos deslumbraron, sino de una manera más chata, hueca. Centrada en los sentimientos de la protagonista, en su mundo interior de adolescente y la posibilidad de abandonar a su familia y besar o no al chico que le gusta, más que en una cosmovisión general donde ese “Elegido” puede cambiar el rumbo de la historia. Aunque acá ella, por ser protagonista, también es especial y puede llegar a alterar ciertos aspectos de la sociedad.

La novela está narrada en primera persona, lo cual refuerza esa idea de mundo interior, pero principalmente está muy mal escrita (por lo menos para el que escribe), haciéndola bastante insoportable de leer. Un libro que no tiene descripciones y sólo se basa en los diálogos es algo bastante difícil de vender (a pesar de eso la novela es un Best-Seller y por eso fue adaptada a la pantalla grande, lo cual habla mucho del consumismo de las masas).

Gracias al guion adaptado de Evan Daugherty y Vanessa Taylor, la película es mucho más entretenida que la novela.

La dirección corre por cuenta de Neil Burger, quien tiene en su haber la película del 2011 “Limitless” (protagonziada por Bradley Cooper) y la maravillosa y sorprendente “The Illusionist” de 2006, protagonizada por Edward Norton y Paul Giamatti, donde se cuenta la historia de Eisenheim el mago.

En “Divergente” Burger tiene una o dos escenas donde toma riesgo a nivel visual y, a diferencia de la novela también, no se hace larga en lo absoluto, a pesar de durar 139 minutos, sí casi dos horas y media.

Los roles protagónicos recaen en la joven Shailene Woodley (como Tris) y Theo James (como Four) y cuenta con la presencia de Ashley Judd (que quizás porque hace de madre de Tris tiene que estar maquillada como más vieja o quizás es sólo que los años la pasaron por encima) y Kate Winslet, pero realmente ninguno destaca en su interpretación.

Sin embargo es una película que tiene todo para ser exitosa (y no sólo por estar basada en una novela que vendió, sorpresivamente, muchos ejemplares), ya que hay acción, enamoramiento juvenil, es de ciencia ficción (o “ficción distópica” como le dicen ahora, utilizando mal el sentido de la palabra distopia) y principalmente tiene la posibilidad de que el público se relacione e identifique con la protagonista.

Es por eso que ya se sabe que la novela que sigue (llamada “Insurgente”) está en pre-producción y tiene fecha posible de estreno el año que viene y la novela que cierra la trilogía (llamada “Leal”) está planeada adaptarse en dos películas (porque si a Peter Jackson le funcionó hacer tres películas con un libro como “The Hobbit” ¿por qué no hacerlo nosotros también?) con fecha tentativa 2016 y 2017.

En el afiche de la película se puede leer “Lo que te hace diferente, te hace peligroso” y en un mundo donde “The Hunger Games” y “Crepúsculo” son sagas exitosas de libros y películas, es totalmente entendible que “Divergente” lo pueda ser, porque justamente no es peligrosa, ni audaz, ni diferente.

Quizás entonces dependa de nosotros ser “los elegidos” para lograr que nuestra sociedad cambie para bien y vuelvan a filmarse películas basadas en buenos libros. Es sólo cuestión de dar el salto.