viernes, 14 de marzo de 2014

La funcionalidad de los Oscars - La Reviewsada de SaKi.



Pasó la entrega los Oscars y, como todos los años, todo el mundo estuvo pendiente de ella. El evento que viene desde 1929 entregando premios para los que trabajan haciendo cine, se transmite en vivo mundialmente todos los años.

Dejando de lado cuales estaban nominadas este año, quienes ganaron y esos datos que podes leer en cualquier lugar, podemos hablar del evento en sí, profundizando un poco. ¿Los Oscars son realmente un premio a un trabajo bien hecho? ¿Es garantía de algo que una película tenga muchas nominaciones/premios a la hora de elegirla para verla?

¿Sirven para algo los Oscars?


¿Hay un criterio basado en lo artístico a la hora de elegir las que terminan siendo seleccionadas...? O es pura propaganda sofisticada de marketing?

Hay hechos que son indiscutibles. El evento es un circo perfectamente bien armado y siempre funciona, tiene los actores más famosos, los directores más productivos, las películas con más producción, show musicales, chistes "internos" que intentan hacerte sentir un cinéfilo y la aparición en vivo de al menos dos o tres de tus estrellas favoritas. Todo esto que parece ser una fiesta, no es solo eso, es un evento que está hecho para generar y/o producir publicidad, con fines de ganar dinero. No te estoy diciendo algo que quizás no sepas, pero está bueno desmenuzarlo un poco.

Los Oscars generan una sensación de prestigio, que no se consigue de otro modo. Consigue que las películas nominadas lleguen a estrenarse en países que quizás si no lo estuvieran, no llegarían. Traen un aumento en recaudación en las salas, mejores precios en formatos de difusión hogareños, sea dvds, blu-rays, tv por cable, internet, netflix, etc. Los beneficios que las películas tienen se notan con creces en el tiempo entre que son nominadas y ganan o pierden el premio, luego de eso, la carrera comercial se agota, aunque sigan vendiendo bien y estando de boca en boca, no se compara con lo conseguido en ese lapso de tiempo.
Lo que hace la Academia de Hollywood es conceder una especie de legitimidad exclusiva dándole el Oscar a un film, esto lo hace un grupo cerrado integrado por más de seis mil personas, entre ellos, actores, guionistas, montajistas y directores. El sistema de votación jamás se discute. Lo que sí se sabe es que, a la hora de elegir, predomina un lado político correctón. Es muy común ver como nominados papeles de gente con algún impedimento físico, o perteneciente a una minoría clara, sufridos bordeando lo extremo.
Algo que también ayuda mucho a volver interesante el evento es mitificar hechos ocurridos en premiaciones anteriores, comentándolos instantes previos a la nueva entrega, datos inservibles que solo se aporta como una curiosidad para el farandulismo cholulo que el espectador puede sentir. Todo esto lleva a que algunos, sabiendo esto, vean la cara de una actriz y crea saber lo que está pensando en ese momento, solo por saber que fue nominada 4 veces y nunca ganó. Una estupidez simple pero sumamente funcional.

El público regular es el perjudicado al elegir solo películas nominadas y/o ganadoras del Oscar, por encima de otras infinitas opciones, cayendo en el círculo vicioso del marketing y circo desmedido. Hay una leve línea que confunde al espectador de las entregas de premios. El Oscar no es una recompensa por un trabajo bien realizado, es un premio a facetas puntuales con fines comerciales.

Los que trabajan seguido haciendo cine no dependen de haber ganado un oscar o querer ganarlo, ejemplos sobran.

¿Que hace la gente común a la hora de elegir qué película ver? Puede preguntar si alguien la vió, leer la sinopsis, buscar el trailer en internet o preguntarle al del videoclub (aún quedan algunos!) si es recomendable. Pero que pasa cuando ven en la tapa de la misma "nominada al Oscar por mejor dirección" o "ganadora del Oscar a mejor actuación"? Piensan automáticamente "algo bueno debe tener". Tienen infinitas opciones, la decisión está entre dos o tres y termina pesando más la que tenga esa frasecita en la carátula.

Los Oscars, hoy, están muy lejos de ser una garantía de confianza. No hay nada mejor que ir afinando el instinto propio a la hora de elegir, comenzar a leer quien dirige, recordar qué films vistos dirigió e ir pensando si gustaron o no. Lo mismo se puede hacer con actores, e ir explorando sub-géneros a los que no le tenías fé y sí le tenías algún prejuicio, te podes sorprender gratamente. Si tu excusa es "no tengo tiempo" pensá que podes poner la película, ver unos minutos y si no te cierra, probar con otra, son infinitas y hoy las opciones para adquirir una en poco tiempo sobran.

La decisión es tuya, a menos que dejes que elijan por vos. Tenés la opción fácil y conformista o aprender a elegir en base a lo que realmente te gusta.