miércoles, 13 de noviembre de 2013

Amor Fantástico - El Gabinete del Dr. Morholt.



Puede ser parte por la llamada "democratización" de la tecnología (o sea, ese acceso global a ciertas tecnologías que antes estaba circunscripto a sólo un grupo minoritario).

Puede ser porque tenemos acceso a otra clase de películas gracias a la "magia de internet" y sus “puertos piratas”.

Puede ser porque hay un cambio de paradigma al momento de contar historias.

Realmente no puedo decir por qué es, pero he notado últimamente que la fantasía (o el elemento fantástico) se puede encontrar en historias de la pantalla grande, dirigidas a públicos que antes consumían otra clase de películas, más estandarizadas y con menos vuelo imaginativo.

Entonces vi la oportunidad de ayudar a todo aquel nerdo/geek/freak que gusta, y mucho, del elemento fantástico a quedar bien con esa posible pareja que, quizás, no lo disfrute tanto.

Porque, seamos honestos, no todos tenemos la posibilidad de tener una pareja que se emocione junto a nosotros cuando se anuncia una nueva regeneración del Dr. Who, o cuando sale la nueva película del maestro Hayao Miyazaki o cuando hacemos un super-mega-hiper combo en un juego de pelea.
Para eso hice esta pequeña reseña. Para ayudar a las parejas a acercarse un poco al mundo freak y no tener que tragarse sapos insoportables como “Sex and the City”.


¿La que puso la primera piedra?:

Ghost (de Jerry Zucker)

Corre el año 1990 y un ya famoso y consagrado Patrick Swayze deja de bailar pasos exóticos para ponerse en la piel de un hombre que es asesinado y que no logra descansar en paz y trascender hasta comunicarle a su mujer quién fue el que lo mató.

Un  clásico ejemplo de historia de "espíritu vengador", podríamos decir, de esas que las historietas de “Tales From The Crypt” estaban llenas.

Pero claro, lo importante no es tanto la resolución de su asesinato, sino que sigue amando tanto, tanto, tanto a su esposa que a pesar de ser intangible la protege contra todo lo malo, incluída la pena por haberlo perdido.

Una de las películas románticas que cualquier nerdo o freak acepta que le gusta sin ánimo de sonrojarse y que es difícil que tu pareja no haya visto, pero que siempre es bueno volver a ver.
Un párrafo aparte se merece la actuación de Whoopi Goldberg, como la médium que canaliza al espíritu del protagonista, aportando comedia a una situación tensa y llena de emoción.

El desembarco argentino:

The Lake House (de Alejandro Agresti)


El argentino Agresti nos narra en el año 2006, y luego de un gran éxito con su película "Valentín", una historia con la pareja de actores que tan bien había funcionado en 1994 en "Speed", Sandra Bullock y Keanu Reeves. Ambos ya consagrados miembros del Star System de Hollywood.

A él lo conocíamos todos por la trilogía de "Matrix" y, para decepción de varios nerdos, por "Constantine"; y a ella por su versatilidad tanto en comedias como en dramas, de esos que seguramente la pareja de cualquier freak lo obligó a ver.

Una historia de amor con estos dos actores llama mucho la atención y promete que mucha gente quiera verla.
 Y “The Lake House” es una clásica historia de desencuentros amorosos entre dos personas que no se conocen, pero que están “destinados” a vivir por siempre feliz... el único problema es que, a pesar de estar totalmente enamorados, viven en tiempos diferentes y se comunican por cartas que se dejan en el buzón de esta extraña casa del lago que ambos habitan.

Es decir, el elemento fantástico es central para el desarrollo de la trama, pero no deja de ser una película romántica, con el final que todos esperamos de una película romántica... o no tanto, pero vale la pena verla.

La más recomendada:

The Time Traveler´s Wife (de Robert Schwentke)

Basada en la novela de Audrey Niffenegger del año 2003, esta historia nos cuenta cómo sería una relación amorosa entre dos personas si una de ellas viajara en el tiempo de manera involuntaria.

Es decir ¿qué tan fuerte puede ser el amor con alguien que puede desaparecer el mismo día de tu casamiento porque viajó al pasado a conocer a su madre antes de que lo pariera? ¿cómo lograr una relación a largo plazo cuando tu pareja desaparece de tu vista y meses después vuelve diciendo que esa persona que conociste hace años y te regaló una flor, en realidad era él mismo?

El elemento fantástico en esta película es de donde parte toda la trama... trama que no deja de ser la de una película romántica donde se explora la fidelidad y las ganas de construir una familia juntos, a pesar de lo incierto de la vida.

En la película actúan Eric Bana (sep, el Bruce Banner de la película de Ang Lee) y la hermosísima Rachel McAdams (de la cual vamos a hablar de nuevo en unos párrafos).

Esta es una gran película, sea tanto como película romántica, como de viajes en el tiempo y, creo yo, es la primera que se puede mostrar a una pareja no-geek y quedar de maravillas.

La que termina como debe terminar:

Seeking a friend for the end of the world (de Lorene Scafaria)


Película del año 2012 que marca el debut como directora de esta actriz y que cuenta una historia de amor entre el personaje de Steve Carell, un tipo aburrido, sin ninguna clase de ambición en su vida y el personaje de Keira Knightley, una chica desinhibida, con una sonrisa siempre en la cara y muchas ganas de experimentar cosas nuevas.

La clásica historia de cómo dos personas totalmente distintas y hasta con una diferencia grande de edad, se empiezan a complementar hasta que se dan cuenta que son el uno para el otro y que se aman profundamente, justamente porque el uno tiene lo que el otro no.

Ah! Me olvidaba de un pequeño detalle. Los personajes se conocen en el momento en que se sabe que el mundo se va a destruir porque se acerca un asteroide a la Tierra que va a diezmar con toda la vida en el planeta.
Así como con “The Lake House”, esta película también juega con ver a dos actores muy reconocidos y super convocantes interactuando por primera vez. Y los pasos de comedia de Carell y las situaciones extrañas, bizarras y peligrosas de vivir en un mundo en el que todos saben que van a morir, están a la orden del día.

Una linda película que se va a disfrutar durante todo momento… hasta el final previsto, claro, que es la escena perfecta para tomar de la mano a esa, tu pareja no-nerda, y decir alguna cursilería previa a un buen beso.

La que te incomoda:

Another Earth (de Mike Cahill)


Un accidente de auto con consecuencias fatales puede pasarle a cualquiera y deprimirse por esas consecuencias, también.

Buscar consuelo en esa persona a la que le jodiste la vida, aunque sea por accidente… bueno, eso no se si le pasa a cualquiera. Y menos si lo hacés fingiendo no conocerlo.

Todas estas cosas no son cuestiones fantásticas ni que sólo se vea en las películas o en la televisión.

Pero ¿qué pasaría si la razón por la que ocurren esos hechos es algo que está fuera de la normalidad, algo fantástico, algo extraordinario como la aparición de un planeta en el cielo, un planeta que se ve exactamente igual que el nuestro? ¿Y si ese planeta lo habitaran seres humanos, reflejos exactos de nuestras vidas?

¿Qué tanto movimiento interno se puede generar dentro nuestro si sabemos que hay alguien ahí arriba igual a nosotros al que, quizás, la vida no lo apaleó tanto?

Este novel director y guionista logra magistralmente la introducción de lo fantástico en una historia intimista sin perder ese ambiente opresivo derivado de la relación entre 2 personas cuyos destinos no deberían haberse cruzado. No es una película fácil, y tampoco romántica. Pero quizás esa pareja no-freak puede ser una de esas personas a las que les gusta el “cine-arte” y esta película combina ese cine con el elemento fantástico de manera magistral.

La que inspiró esta reseña:

About Time (de Richard Curtis)

Cuando vi el tráiler de esta película, que se estrenó esta semana en los cines, pensé en todas esas frases con las que comienzo esta reseña.

La idea de la película es simple, tiene un elemento fantástico como disparador, pero principalmente es una comedia romántica. Una de las cosas que el director ya nos mostró que sabe filmar con su famosa “Love Actually”, pero que también sabe escribir con las recontravistas por todos, “Four Weddings and a Funeral”, “Notting Hill” y las dos películas de “Bridget Jones” (sí, esa donde la hermosísima Renné Zellweger está gorda y fea).

En “About Time” se cuenta la historia de un tipo perdedor cuyo padre (el tremendo Bill Nighy) le revela algo que él ya sabe desde chico: todos los hombres de la familia pueden viajar en el tiempo, pero sólo para atrás, para cambiar cosas de su propia vida.

Entonces el protagonista, en vez de empezar a saltar para atrás y ver qué cambios interesantes puede generar si tomara su vida de distinta manera, decide conocer a una mujer para poder ser “feliz para siempre”.

Así es como conoce al personaje de Rachel McAdams e intenta conquistarla una y otra vez, saltando al pasado cuando hace algo mal, hasta que lo logra (sep, la misma actriz que antes se había enamorado de Eric Bana en “The Time Traveler Wife”… o sea esta mina debe tener un fetiche con los viajeros en el tiempo. ¡Gran oportunidad para el mutante Bishop!).

La comedia, como dije antes, no deja de ser una comedia de enredos… de los que pasan cuando intentás enamorar a alguien si tenés el poder de viajar en el tiempo para arreglar todas las giladas que hiciste/dijiste. Pero claro, lo importante, siempre, es conseguir el amor perfecto. Por eso esta película es especialmente perfecta como para llevar a esa pareja no-geek al cine y quedarte definitivamente con su corazón.

El Bonus Track:

Somewhere in Time (de Jeannot Szwarc)


Esta es una película de 1980, de un director que hizo muchas cosas (entre ellas Tiburón 2 y la película de Supergirl, pero también que trabajó mucho en televisión en series como Ally McBeal, Supernatural o Fringe) y que tiene como protagonista nada más ni nada menos que a Christopher Reeve (no hace falta decir quién es, supongo) y a Jane Seymour (la Doctora Quinn, entre otras tantas cosas).

Esta película se filmó justo después de “Superman”, o sea que se colgó del éxito de Reeve en esa cinta, pero aparte es la adaptación de la novela “Bid Time Return” del gran, gran, gran Richard Matheson, que también la adaptó para la pantalla grande. Sí, Matheson, el escritor de “I am Legend” (el libro, no la espantosa adaptación de Will Smith), “The Shrinking Man” y “What Dreams May Come” entre otros tantos libros impresionantes que muchos conocimos gracias a que fueron, en su mayoría, adaptados al cine (a veces mejor, a veces peor) y que también trabajó en la super recomendable “The Twilight Zone” como guionista de muchos capítulos.

En esta historia el personaje de Cristopher Reeve se enamora de una mujer a la que cree inalcanzable. Pero no por diferencias en los estratos sociales, ni porque esté casada, ni porque ella no le preste atención. Sino que es inalcanzable porque vivió en otro tiempo, hace muchos años.

Entonces este hombre, desesperado por amor, busca la forma de viajar en el tiempo para poder conocerla y, quizás si todo va bien, que ella se enamore de él tanto como él la ama.

Una hermosísima historia de amor y de lo que el amor puede lograr, incluido el romper con la prisión de la cuarta dimensión. Una de esas películas con la que se pueden sumar puntos con cualquiera que no sea nerdo.

Nota aclaratoria final:

Para cerrar quiero comentar algo que seguro me pueden estar criticando, y es que sólo tuve en cuenta al cine yanki y dejé afuera increíbles historias de amor como por ejemplo “No te mueras sin decirme a dónde vas” de Eliseo Subiela (o tantas otras de este director argentino) o “Como agua para chocolate” de Alfonso Arau, que desbordan fantasía. Pero esto fue apropósito, porque el cine latinoamericano (con amplias influencias en el cine europeo), tiene una cuota fantástica mucho más fuerte que el estadounidense.