jueves, 2 de enero de 2014

Youtube: la Venganza del Hombre común - La Columna de Logan.


Hace unos 7 años más o menos estaba obsesionado con una banda vieja a la que había podido redescubrir gracias a la generosidad del formato de audio comprimido MP3. Para los que no tienen ganas de restar, estoy hablando de mediados del 2006, año en el que ya la banda ancha se había consolidado como servicio de internet, razón por la cual compartir archivos de gran tamaño comenzaba a hacerse realidad. Volviendo a mi anécdota, el grupo con el cual perdía horas escuchando discos y rastreando sus videos era The Pixies, y al no tener una página confiable en la cual poder ubicar la videografía oficial (ya existía la wiki en esa época, pero era mucho más chica e incompleta), lo que sencillamente hacía era meterme en youtube, poner el nombre de la banda seguido del tema y ver que me tiraba. Standard procedure, obviamente. No perdamos de vista entonces que estaba promediando el 2006, youtube hacía apenas un año se había puesto on-line, y en muy poco tiempo se había transformado en la página para buscar todo tipo de material audiovisual, pero aún tenía sus grandes carencias, y todavía faltaban un par de meses más para que fuera adquirida por google, una operación que se terminaría concretando en octubre de ese mismo año por la módica suma de 1.650 millones de dólares.





Tasha, Dishka y el círculo de baba.

El caso es que uno de los temas que busco es "Hey", track 13 del disco Doolittle (1989), álbum que se terminaría convirtiendo en mi favorito de los Pixies... cuál no sería mi sorpresa al ver que no tenía un video oficial, aún cuando a mi entender era uno de los cortes más gancheros que re daba para ser de difusión. Pero no, solo "Debaser", "Here Comes Your Man" y "Monkey Gone to Heaven", todos cortes de difusión, habían sido favorecidos con un video. Un poco frustrado descubro que, de todos modos, arriba de todo en la búsqueda figuraba un video amateur con una imagen congelada que mostraba a dos chicas absolutamente desconocidas para mí. Antes de darle play, solo para escuchar el tema pero sin ninguna expectativa acerca del contenido del video, verifico que la cantidad de reproducciones que tenía, era cuanto mínimo, poco habitual para algo casero levantado en esta página.
Bueno -pensé-, sea quien sea el que armó y levantó este video se cercioró de que todos sus amigos de la vida entera le dieran play, claramente. Finalmente dejé de delirarla y accedí a ver el video... y entendí todo. Fue un momento de iluminación para mí, y casi podría asegurar que con mi mente viajé en el tiempo.


El video que estaba viendo había sido subido por una usuaria de nombre Tasha, y luego pude corroborar que quienes lo protagonizaban eran Tasha y Dishka, dos amigas que vivían en Israel. ¡Israel, loco… el culo del mundo para mí! ¿Pero qué carajo pasaba con este video, porqué me había abierto la cabeza en dos? Por varios motivos. El principal: era sencillo, casero, pero tenía un gran laburo de edición y post-producción, al punto tal que me llevaba a preguntar: ¿cuántos videos profesionales vi con exactamente la misma calidad de edición y composición... y cuantos peores a este? Miles. ¡Y estas minas lo hicieron gratis! ¡GRA-TIS! ¿Y de que iba? Bueno, de nada en particular: dos chicas jóvenes, delgadas y en cierta forma sexys (un tipo de sexyvidad que se comenzaría a imponer mediáticamente justamente por esos años, producto de, entre otras cosas, el acenso y la imposición de la estética Nerd-Emo-Geek en los medios audiovisuales) practicaban unos pasos de baile delante de la cámara al ritmo del tema de los Pixies, y en una perfecta edición se mostraba además algo de bardo por parte de las protagonistas, siempre acorde con el tono y el momento del tema, intercalando distintas vestimentas. Era original -para la época-, fresco, creativo, ingenioso, utilizaba a full los pocos recursos con los que las realizadoras contaban, pero por sobre todas las cosas, ¡había sido visto por millones de personas, en pocos meses! ¡¡¡Y ni siquiera era yanquie!!! Esto era la consolidación de la teoría de Andy Warhol de los 15 minutos de fama de todo el mundo, pero anteponiendo una excepción: tenías que tener una habilidad, algo en lo cual poder destacarte, algo para explotar que fuera digno de ver por millones de espectadores. Porque en poco tiempo cientos de millones de personas levantarían todo tipo de videos, con infinitos contenidos y variadas temáticas, y no todos podrían lograr lo que Tasha y Dishka habían coronado hasta ese momento.
En eso, ven, me equivoqué: no fue necesario tener empíricamente hablando una "habilidad" para poder destacarse. Pero en lo que sí acerté es en que youtube se convertiría en la ventana al mundo de cada persona, cada individuo, por más ignoto que sea, por mas minúsculo e insignificante que fuera el lugar donde habitaba o el contexto que lo rodeara, en youtube tendría un canal para poder gritarle al mundo lo que quisiera, y poder tener la oportunidad de ser escuchado por cientos de personas eternamente... o hasta que dicha página o el mismo usuario decidiera dar de alta el video en cuestión. De hecho: ni siquiera eso podría detener ese mensaje. En ese momento me di cuenta que el potencial de esa página era tan grande que lograría que NADA PUDIERA REALMENTE DESAPARECER DE LA WEB una vez subido a la misma. Si alguien lo subía, otro podía hacer una copia de respaldo en su disco para poder, de ser necesario, volver a ponerlo on-line. Así se generaría un feedback similar al que en esos años vivíamos con las redes P2P, miles de usuarios colaborando para que nada se pierda y todo se mantenga en la nube. Recuerdo muy bien que producto del video "Hey" de Tasha incluso llegué a pensar que a los administradores de Youtube esto se les iba a escapar de las manos. Verán, en esos años previos a la adquisición de Google, las restricciones que la página tenía eran ínfimas en comparación con las actuales, y las regulaciones eran un chiste, y podían ser fácilmente burladas. Cuando comencé a proyectar imaginando la que se les venía fue inevitable caer en la cuenta de que si querían seguir creciendo, además de hacer una inversión millonaria en servidores deberían asegurarse de que SIEMPRE el contenido estuviera regulado. De lo contrario los usuarios podían ir más allá de la clásica piratería, podían generar contenido homofóbico, racista, pedófilo... El video How to make an atomic bomb in your own Kitchen and detonate it remotely in a Skyscraper no tardaría en aparecer y el pánico que provocaría su viralización causaría caos y destrucción acercándonos al fin de la civilización... bueno, probablemente esa sea otra exageración de mi parte, pero la idea se entiende.

The Winter is Coming... Not!

Pasaron solo 7 años y el mundo en la web (por la web y para la web) cambió una enormidad. La llegada de youtube de la mano de la expansión del ancho de banda democratiza el acceso al vídeo en la red y facilita que los propios usuarios se conviertan en verdaderos generadores de contenidos. El sitio web evoluciona en poco tiempo y salta a otros dispositivos (tablets y smartphones), su crecimiento ha sido exponencial y en parte es gracias al soporte y retroalimentación que se da con otras redes sociales: cada día se reproducen en Facebook 500 años de vídeo de Youtube y cada minuto se comparten 800 vídeos en Twitter. La penetración que esta página tiene en nuestra cultura y la influencia que tiene en nuestras vidas es imposible de cuantificar o medir, no por nada en el 2013 siguió siendo la 3er página más visitada del mundo, justo debajo de Facebook y Google. Solo pensar que Youtube consigue 4.000 millones de vídeos vistos cada día, 60 nuevas horas de vídeo por minuto y 400 millones de visitas diarias desde smartphones y tablets nos puede permitir acercarnos a la idea de la magnitud de su alcance. Durante los ’90 se popularizó una frase relacionada con la televisión, un poco para denotar la penetración que tenía y la importancia que el televidente promedio le daba y otro poco para elevar una crítica hacia el adoctrinamiento de la sociedad a través de este medio, el dicho dictaba que si no salió en T.V., entonces no sucedió. Hoy por hoy podemos tranquilamente utilizar el mismo lema, pero ubicando la página youtube en lugar de la T.V.
Y es que la televisión no solo no fue ajena a la llegada de este sitio, fue desplazada de muchas costumbres y lugares y tuvo que reformular muchos de sus contenidos para no perder por goleada ante youtube. El vivo nunca podrá ser reemplazado (y así y todo hay recitales y eventos exclusivos para ver en streaming solo por youtube... cof cof), pero de ahí para abajo, todo es posible. La realización de contenido exclusivo para youtube es una realidad, y vaticinar hacia donde van a ir con estas posibilidades es ya arriesgarse demasiado. La aparición de señales como Netflix está directamente relacionada con el consumo de videos de youtube y el desadoctrinamiento de toda una sociedad que durante décadas se acostumbró a que le impongan el contenido audiovisual que vería y el horario en el que podría hacerlo, amén de la publicidad que tendría que morfarse entre bloque y bloque cuando no dentro del mismo producto. En referencia a esto último, si bien youtube no es ajena a la publicidad –y este temita se puso particularmente denso en los últimos 3 años-, la misma es mucho menos invasiva que la que absorbemos de manera casi inconsciente en la televisión, y en muchos casos puede ser fácilmente bloqueada.
Finalmente, las restricciones que esta red social audiovisual tienen, que responden al orden de los contratos comerciales que los administradores de la misma cierran con distribuidoras de cine y productoras varias (de música, cine, televisión, etc), claramente siempre va a ser, para nosotros, los consumidores sin intereses comerciales, una incomodidad que deberemos tolerar en pos de que este sitio siga activo y pueda sostenerse on-line. Este dilema nos ubicó durante unos meses en la búsqueda de páginas similares que fueran menos ortivas con este tema y más generosas con los permisos para compartir material con copyright, y muchos de nosotros incluso vaticinamos el final de youtube producto de sus propias políticas altamente restrictivas… nada más lejos de la realidad: la facilidad que ofrece su sencilla y deducible interface sumados a la familiaridad y popularidad que arrastra hacen que youtube, hoy, siga siendo la página número uno para este tipo de contenidos, y siga estando al frente de cualquier tipo de tendencia que pueda tenerla como protagonista. Discos completos, películas y animación en HD, cortometrajes y mediometrajes independientes, y sobre todo bloques de segmentos que fueron transmitidos por T.V. en vivo,  estas son las tendencias más buscadas en este sitio que la siguen manteniendo arriba de todo, imbatible.

In the End… there can be Only One



El video de Tasha y Dishka finalmente las hizo "famosas", y en poco tiempo el mundo entero comenzó a reconocerlas como las "Hey Girls". Un par de noticieros de Israel incluso las invitaron para entrevistarlas, y aunque no recibieron la comisión correspondiente por parte de youtube debido a las actuales 33 millones de reproducciones que tienen ese video, si fueron imitadas y parodiadas hasta el hartazgo -incluso por el propio Kevin Smith en persona-, y marcaron el camino a seguir para muchos. Modestas y con un perfil muy bajo, Tasha y Dishka siguieron con sus vidas como si nada, ya que, después de todo... solo metieron un gol de media cancha en Youtube hace unos 8 años, tampoco es que descubrieron la vacuna contra el cáncer o algo parecido. Y antes que cualquiera, ellas fueron siempre conscientes del la dimensión de lo que habían conseguido, y de todos modos lo intrascendente que sería con el correr de los años… ¿o no?
De lo que podemos estar seguros es de que si hoy hubo columna, también la habrá el jueves que viene, acá, en Tierra Freak.