jueves, 10 de octubre de 2013

Se fue Tom Clancy - La Columna de Logan.



La semana pasada, con solo 66 años, nos abandonó el escritor oriundo de Annapolis, Maryland que con el paso de los años se transformó en un referente dentro de la literatura de novelas de acción relacionadas con el espionaje, las cuales estaban casi siempre altamente militarizadas. Debido a la finalización de la serie de AMC, Breaking Bad, la reseña de esa semana se la dediqué a ella, pero prometí regresar esta semana para armar un recorrido por la trayectoria de este autor que tuvo y tiene un gran números de fans, y que terminó formando parte de la cultura norteamericana, tanto por el éxito de alguno de sus libros y por la buena llegada de los films que adaptaron algunas de las aventuras del agente Jack Ryan como por algunas peculiaridades en las que se vio involucrado.


No Country for pussy Men

El éxito como escritor a Clancy le llegó bastante rápido, y es por eso que su trayectoria entera es meritoria de ser mencionada. Al igual que lo sucedido con la 1er novela de Stephen King, Carrie, el debut de Clancy con The Hunt for the Red October [1984] fue un éxito de ventas y de la noche a la mañana catapultó la carrera de Tom al infinito y más allá, máxime cuando el presidente Ronald Reagan anunció en una entrevista que era su libro de cabecera y le fue imposible dejar de leerlo. Imposible tener más promoción que esa a mediados de los ’80, vieja. Clancy Wins. Perfect!. Esta primer novela es la punta de lanza para un mundo propio que se fue armando y desarrollando a lo largo de 16 novelas publicadas entre el ’84 y el 2012, las cuales podríamos enmarcar dentro de un Ryanverso (denominación derivada de la conexión entre todas estas novelas, el agente Jack Ryan y su hijo) y que están plagadas de datos técnicos militares que suelen ser el delirio de todo fan del género. No podía esperarse menos de un enfermizo lector de revistas militares y literatura sobre armamento como él que no pudo ir a Vietnam por problemas en la vista y que en su jardín en vez de tener unas estatuas de enanos tiene un tanque Shermann, ¿no?
Lo cierto es que el amigo Clancy fue criticado por ser extremadamente nacionalista y xenófobo, y es considerado por muchos el Rambo de la literatura: un soldado de las letras encargado de dejar bien en claro al resto del mundo que U.S.A. gobierna la política internacional, desconoce la importancia de la O.N.U. y asegura la paz en el planeta, usando como arma una prosa plagada de artefactos de guerra e intrigas y conspiraciones en las altas esferas del poder.
No conforme con la literatura de ficción (la cual incluye, además de la saga antes mencionada, otras novelas escritas con colaboradores como Larry Bond –diseñador de videojuegos-, Martin Greenberg o Peter Telep –escritor de ciencia ficción de poca monta-), este fanático de los Minnesota Vikings (equipo de fútbol americano que durante los ’90 intentó comprar) tiene en su haber una decena de libros publicados entre el ’93 y el 2004 que no son de ficción y funcionan como guías para conocer cierto armamento militar, como por ejemplo Submarine: A Guided Tour Inside a Nuclear Warship [1993], un manual para conocer dos submarinos nucleares por dentro, el USS Miami y el HMS Triumph, o Fighter Wing: A Guided Tour of an Air Force Combat Wing [1995], un libro que explica algunos de los operativos en los que se vio involucrado un escuadrón aéreo norteamericano, el United States Air Force's 366th Fighter Wing, que entre otras cosas participó de la Operación Tormenta del Desierto en Irak a principios de los ’90.

Esto no es un juego, nene

Una faceta de Clancy que es digna de mencionar es la relación que tiene con los videojuegos. En 1993 se junta con Doug Littlejohns y juntos crean Red Storm Entertainment, una empresa de videojuegos que en el año 2000 fue adquirida por Ubisoft y que tiene una larga, larga, larguísima lista de juegos, generalmente agrupados en sagas, de las cuales destaca la saga Rainbow Six, una franquicia que tiene origen en el libro homónimo publicado en 1998 y que al día de hoy lleva ya 9 ediciones, 6 expansiones y un juego próximo a salir el año que viene.
Pero esto, que comenzó como una audaz e inteligente movida marquetinera, se terminó transformando en un monstruo imposible de contener por usuarios o lectores casuales: de a poco comenzó a construirse un universo tan complejo como entretenido que tiene un constante feed-back entre ambos medios. Hay juegos que inspiraron novelas, novelas que enmarcan ciertas sagas de videojuegos, un universo que conecta todo de forma fuerte o con pequeños detalles, y una extensa cronología que ordena y cataloga los hechos. Este monstruo que comenzó con un tímido simulador de submarino (The Hunt for Red October [1987]) es hoy por hoy probablemente el universo de videojuegos en 1ra persona más complejo que se haya orquestado.
Como si se tratara de un Dios que tiene que estar en todo y aportar datos y sabiduría para todos, Clancy además pone el nombre a un sin-números de sagas en las cuales apenas si colabora con el plot y oficia como editor de los textos publicados, y patrocina, incentiva y adoctrina a un puñado de escritores que escriben sobre temáticas similares. Algunos nombres de sagas para que tengan en cuenta si les interesa rastrearlas, tanto en brolis como en fichines: Tom Clancy's Splinter Cell (otra de las sagas de videojuegos que tuvo un rebote tremendo), Tom Clancy's Ghost Recon, Tom Clancy's Net Force, Tom Clancy's Power Plays, Tom Clancy's EndWar y Tom Clancy's Op-Center, probablemente la más celebrada de todas.

Mi nombre es Ryan, Jack Ryan
 
Aún con tanto material escrito y con la fuerte relación que tiene con el mundo del videojuego, el hecho de que al día de hoy solo se hayan adaptado 4 novelas de Clancy al cine y todas hayan tenido como protagonista al agente Jack Ryan hace que este personaje y la serie que lo tiene como protagonista se posicionen por encima del resto de la obra de Tom y sean la referencia más evidente de cientos millones de lectores en el mundo.
Intentando no ser redundante los invito a que le peguen una rápida leída a mi reseña sobre la C.I.A. que realicé hace unos meses, misma en la que me explayo sobre las adaptaciones para el cine donde fue caracterizado por Alec Baldwin, Harrison Ford y Ben Affleck, lo que voy a hacer acá es contar un poco quien es este Irlando-americano y que fue de su vida.
John Patrick "Jack" Ryan, Sr. comienza relacionándose desde muy temprano con las fuerzas armadas, ingresando apenas egresado del Boston College al cuerpo de Infantería de marina de los Estados Unidos, llegando a ser segundo teniente. Lamentablemente, unos meses después de haber egresado del curso básico de oficiales en Quántico, un helicóptero en el que se encontraba sufre un accidente en unas maniobras con un ejército de la O.T.A.N. [Organización del Tratado del Atlántico Norte - en inglés: North Atlantic Treaty Organization, N.A.T.O.] que termina por lesionarle la espalda y pone un cierre a su prometedora carrera como militar además de volverlo adicto a los analgésicos. 
4 años después, advocado al laburo como profesor de historia en la Academia Naval de los Estados Unidos en Annapolis, Maryland, y ya con una esposa bajo el brazo, le llega el ofrecimiento de colaborar como consultor de la C.I.A., y es ahí donde se genera el punto de inflexión que lo posicionaría como héroe de acción de las novelas de Clancy. De consultor (y luego de evitar un atentado al futuro Príncipe de Gales en Inglaterra, situación que le provocó una herida de bala en el hombro) pasó a ser analista tiempo completo, y en muy poco tiempo fue un agente de campo, participando en misiones para los servicios de inteligencia estadounidense y británicos, intentando desarticular células terroristas, y poniendo muchas veces a su familia en riesgo.
Más o menos para esa época sucede el quilombo con el Capitán Marko Aleksandrovich Ramius y el conflicto con el submarino Ruso Красный Октябрь (Octubre Rojo), la trama que daría pie al libro The Hunt for the Red October (1990). Luego de salvar el día con este problema asume el puesto de asistente del almirante Greer con el título oficial de Asistente Especial del Director de Inteligencia (DDI), y después de algunas aventuras más, entre las cuales podemos destacar el rescate a un pequeño grupo de soldados estadounidenses aislados en la selva de Colombia y el desenmascaramiento de una operación altamente secreta e ilegal aprobada por un asesor Nacional de Seguridad corrupto, y tras la muerte de su mentor y amigo Greer por cáncer, termina asumiendo como Director de la C.I.A., en medio de un enfrentamiento con Elizabeth Elliott, asistente de asuntos internacionales para el candidato a la presidencia J. Robert Fowler, quien descubriríamos es nada menos que la amante del presidente, y que juntos se transformarían en una gran espina en el culo de Ryan, desacreditándolo y no oyendo alguno de sus consejos, lo que puso a U.S.A. a los pies de una 3er guerra mundial, con Rusia como potencia enemiga, en un conflicto que tiene muchos puntos en común con el actual quilombo en Siria.

Las similitudes entre conflictos de carácter internacional que narró Clancy y situaciones que años después se dieron en la vida real es una constante de su literatura, y el mejor ejemplo de esto sucede en el libro Debt of Honor [1994], donde tenemos un 11 de septiembre anticipado, cuando un piloto nacionalista de Japan Airlines vuela su Boeing 747 directo contra el Capitolio durante una sesión del Congreso con el presidente Durling, provocando la muerte de casi toda la línea de sucesión presidencial y poniendo a Ryan, quien recién había sido elegido como vice-presidente, juramentando como presidente de forma inmediata. Las consecuencias de esto las podríamos leer en el siguiente libro de la saga, Executive Orders [1996], ambas novelas altamente recomendados por quien escribe esta reseña. No quiero irme sin mencionar The Teeth of the Tiger [2003], libro que nos narra las aventuras de Jack Ryan Jr., nada más y nada menos que el hijo del mismísimo galardonado agente, misma que estoy terminando de leer en estos días y que debería haberse llamado Hijo ‘e Tigre, obviamente. Otra cosa obvia es que esto se ha terminado, y que espero encontrarlo de nuevo la semana que viene, acá, en Tierra Freak.