lunes, 10 de junio de 2013

Por eso decidí hacerle zapatos que hagan que quiera levantarse y caminar - El Mangazo de Manipuladora.




“Un débil trueno
El cielo nublado
Capaz viene la lluvia
Si es así, ¿te quedarías conmigo?”


En “The Garden of Words” vemos a Takao Akizuki, un chico de 15 años que todos los días lluviosos falta a la escuela y se encuentra en un típico jardín japonés con una mujer adulta de la que no sabe nada.
Sus intereses no encajan con los de los chicos de su edad. A él le gusta hacer zapatos. Sí, zapatos.
Pasa su tiempo diseñando en su cuaderno, fabricando, comprando telas y todo lo necesario para mejorarlos.
Vive con su hermano mayor y su mamá, que le falta un par de jugadores y sale con hombres más chicos que ella. Su hermano está a punto de mudarse con su novia y esto le causa disgustos a mamita, que además es bastante caprichosa.


Takao no les da bola, está demasiado concentrado con su meta. Trabaja a medio tiempo en muchos lugares para poder pagarse sus estudios y para que no decaiga su interés por los zapatos, practica todo los días para perfeccionarse.
Un día lluvioso, el primero de la temporada, se encuentra con una mujer tomando cerveza y comiendo chocolate temprano a la mañana.


Si bien al principio le parece que es una mina rara y no interactúan mucho, sus encuentros bajo ese techito en los banquitos del jardín se hacen muy frecuentes. Cada vez que llueven, él falta a la escuela y ella a su trabajo. Ahí se encuentran y pasan la mañana juntos.
No conversan entre ellos, cada uno está metido en sus cosas y eso es suficiente para Takao, en su inocencia, para sentirse atraído por esta mujer de la que no sabe mucho.
El tiempo transcurre, cambian las estaciones y por más que los dos deseen mucho que la temporada de lluvia nunca acabe, el mundo sigue girando.
A Yukino le hace bien la presencia de Takao en su vida. Su vida adulta y conflictiva la acorralaban hasta el día que llovió y se lo encontró por primera vez. Incluso para animarlo a seguir su meta de diseñar zapatos.
Al terminarse las lluvias, los dos siguen sus vidas sin encontrarse en ese lugar. No es como si pudieran evitarlo.
Takao ya no tiene excusas para faltar a clases y Yukino, bueno, sigue ahí en el mismo lugar esperando que él vuelva a aparecer.
Pero como todo lo que pinta lindo, su reencuentro se lleva a cabo pero no en las mejores condiciones. Y aún cuando Takao esté consciente de sus sentimientos hacia ella, es casi imposible que pueda hacer algo al respecto.



Sobre la obra

Makoto Shinkai  es un tipo muy conocido para el que está interiorizado con la animación japonesa en general. Es raro la persona que le guste el anime y no haya escuchado sobre su película más conocida, 5 cm por segundo.  Este chinito copado que tiene películas animadas muy lindas, algo melosas y buenas para quedar bien con tu novia también hizo otras obras como:  Hoshi no koe (donde además de dirigir hizo la voz del protagonista), The place promised in our early days y laburó para la serie de TV, Ef – A tale of memories y su secuela.
 Kotonoha no Niwa (El jardín de las palabras) tiene un manga publicándose desde Abril del 2013 en la Afternoon (BLAME!, Mushishi, Vinland Saga) de Kodansha y todavía no tiene ni un tomo completo en venta. La historia está a cargo del mismo Makoto, mientras que el dibujo lo hace Motohashi Midori.
La película producida por CoMix Wave Films se estrenó en cines japoneses el 31 de Mayo del 2013 y tuvo una duración total de 46 min. Algo corto para lo que estamos acostumbrados pero cuenta lo justo y necesario. Nada le falta.
La canción principal de la OST, “Rain” es interpretada por Motohiro Hata que anteriormente hizo trabajos como el ending de Sakamichi no Apollon, Altair” y el opening  siete de Naruto Shipuuden, “Toumei Datta Sekai”.
Las voces a destacar esta vez son los roles de Takao, interpretado Miyu Irino (Syaoran en TRC, Tadakuni en Danshi Koukousei no Nichijou, Daisuke en DNAngel) y  Yukino por Kana Hanazawa (Kuroneko en OreImo, Anri en Durarara!! y miles de roles conocidos).
En entrevistas, el director de esta película, dijo que se representaba el amor en su término tradicional (O sea “koi”) ya que el concepto moderno (“ai”), se había adoptado del occidente.
Koi (), es amor/anhelo por el otro. Un amor más pasional o romántico mientras que Ai () es un amor más amplio y menos posesivo. Shinkai dijo que era su primera vez haciendo una película que representara el amor en su estado más puro.
Qué te digo, ideal para que tu novia piense que te gustan las cosas románticas. Encima cortita, capaz después te recompensan. No podés pedir más.